Es cuestión de actitud

La forma en cómo nos mostramos al mundo determina nuestra manera de sentirnos y también los resultados que obtenemos. Nuestra actitud lo va a determinar casi todo: el tipo de empleo que consigas, la pareja con la que estás o deseas encontrar, la felicidad que sientes y el futuro que te espera.

Si queremos cambiar de actitud, debes cuidar algunos detalles importantes, como la postura, la sonrisa hará una gran diferencia, pues “si quiero resultados diferentes debo mostrarme al mundo de forma diferente”. Eso implica sonreír cada vez que puedas, caminar de forma recta, como si quisieras comerte el mundo y que se sienta tu presencia en cada lugar donde ingreses. Fíjate en la forma en como caminas por la calle, con un gesto apagado, mirando al suelo, encorvado, estás proyectando pesimismo.

Si eres una persona pesimista, cambia de enfoque, dejando la crítica, juicio y que no funciona bien. Sin la actitud adecuada perderemos oportunidades en la vida, aunque seas curricularmente excelente o el hombre o mujer más hermoso/a.

¿Cómo quieres vivir las 24 horas nuevas de tu vida? Cada nuevo amanecer es una hoja en blanco para poder escribir cómo quieres que sea tu día, una nueva oportunidad o una repetición del día anterior con quejas y pesimismo. Hay personas que ven el amanecer como un regalo y otras como un castigo, ¿de qué manera despiertas cada día?

Para despertarse al 100% debes descansar al 100%, dormir las horas de sueño necesarias y acostarte pensando en que mañana será otro día mejor. Pues está demostrado que si te acuestas con preocupaciones, dormirás peor y despertarás peor.

No te sientes a esperar que todo te llegue sin hacer algo, toma acción y no consideres la vida como todo o nada, seamos más agradecidos y busquemos el lado amable de las cosas, por más difícil que parezca.

Somos seres sociales y esto implica sintonizar las emociones de los demás a través de la empatía y simpatía. Las relaciones estresantes incrementan el riesgo de mortalidad, si te gusta pelear por pelear, tienes mucho por perder.

En qué momento convertimos algo tan nefasto, como es el estar preocupados constantemente. Verifica si está en tus manos cambiar la situación y si ningún cambio es posible, no dediques más tiempo ni espacio a lo que te desmotiva.

¡Recuerda que aquello en lo que más piensas, más poder le das¡

La autora es Psicóloga – terapeuta.

Email: marielabaldiviesolema@gmail.com