Facilidad que resultará en problema social

Concluye el tercer bimestre y en esta etapa al obtener los boletines de calificación muchos padres de familia inician el peregrinaje de las entrevistas personales con los profesores donde sus hijos quedaron reprobados, procedimiento que concluirá en un problema social a futuro.

De acuerdo con el sociólogo Miguel Pardo, el nuevo sistema de evaluación en el sistema educativo de primaria y secundaria, “si bien permite que se reduzca la cantidad de estudiantes reprobados, pero sin la garantía de que estén plenamente formados para lograr responder no solo a la formación de educación superior, sino al mercado profesional, este aspecto se convertirá a futuro un problema social, porque quedarán en el camino del desempleo o frustrados por no poder responder en el sistema de educación superior”, explicó.

Si antes con el anterior sistema de educación había bachilleres que no tenía un nivel adecuado de la lectura y comprensión, “existía carencia en sus habilidades y destrezas en oralidad, matemáticas, en la actualidad se ahonda el problema porque el profesor está obligado a aprobar a casi todos sus alumnos, para evitar tener problemas en ante la Distrital”, estableció.

En tanto, la profesora Nercy Mamani añade que no existe un alto índice de reprobados tanto en inicial, primaria y secundaria, lo que puede existir es una cantidad de dos a tres casos de cambio de establecimiento escolar o abandono. En secundaria ha bajado la cantidad de reprobados.

Cuando un profesor tiene cerca de cinco reprobados en un curso, debe muñirse de una serie de documentos, como informe detallado del por qué esta reprobado cada uno de los estudiantes a qué caso responden. Qué tipo de adaptación curricular logró aplicar el profesor, para permitir el rendimiento del estudiante, en caso de escolares que enfrenta el problema de divorcio de sus progenitores, “la normativa establece que es el maestro quien debe hacer adaptación curricular para ese estudiante con problemas educativos, entonces que en todo el proceso el maestro debe sentarse en la planificación para hacer adaptación curricular que debe ser parte de la propuesta establecida por el maestro en una evaluación diferenciada, en caso de no haber realizado este proceso, el profesor está en riesgo de ser procesado, es por eso que el estudiante como se lo ve no reprueba casi nunca”.

Los profesores que llegan a entregar sus notas con o sin reprobados, deben mandar un informe ante la Distrital de Educación, donde se incluyen las entrevistas que se han tenido con los padres de familia, donde se incluye los compromisos firmados, la explicación de la adaptación curricular y la intervención en casa, documentos que deben acompañar desde el primer bimestre hasta el final.

“En caso de que el padre de familia no hace seguimiento, se incumple a los compromisos, etc., recién con esos argumentos se puede reprobar al educando. Por lo tanto, el profesor dífilamente hará este trabajo que aumenta la carga laboral en él, a ese proceso se suma la súplicas de los padres de familia de buscar por diferentes medios que los escolares aprueben el curso, sabiendo o no la materia”, añadió.