Cuidado compartido: clave para una vida sostenible

La lucha contra las desigualdades es uno de los temas centrales del trabajo que desarrolla Oxfam en Bolivia. En ese afán ha realizado un informe que plantea una agenda de interés común, un nuevo objetivo de políticas públicas: la democratización del cuidado en la sociedad.

Verónica Paz, coordinadora de incidencia de Oxfam en Bolivia, afirma que dicha investigación se basa en una encuesta nacional sobre las percepciones, aptitudes y creencias que tiene las mujeres en relación con el tema del cuidado, y que fueron analizadas por profesionales en sociología, política, economía, entre otros.

Los datos recogidos en el informe dan cuenta de una realidad comprobada en el mundo y en el país, que las mujeres le dedican mayor tiempo al cuidado de las personas dependientes y tareas domésticas, tiempo de trabajo no remunerado y que se les asigna una mayor responsabilidad con la familia en relación con el varón.

ENCUESTA

Dicha encuesta sirvió para recabar información de la población femenina de 18 años en adelante, que cuenta con la mayoría de edad y que puede responder a este tipo de cuestionarios sin necesidad de autorización, situación que hubiera sido distinta si se tratara de adolescentes.

“En el estudio se procedió a realizar cortes por grupos de edades. En el primer grupo están mujeres en edad reproductiva (18 años para arriba) y, en el segundo grupo mujeres por encima de las 60 años. Esta diferencia generacional afecta en su toma de decisiones, pues una joven piensa distinto a una jubilada en temas del cuidado”, afirma Paz.

Asimismo, el estudio muestra algunos puntos de coincidencia, uno de los más relevantes se relaciona con el cuidado, pues muchas de ellas están de acuerdo que esta responsabilidad por lo general recae en la mujer, pero consideran injusta, porque libera al varón del tiempo de cuidado de sus hijos y del adulto mayor.

“Sin embargo, se evidencia la tendencia que tiene la mujer joven por hacer cambios en relación con los pensamientos que se tiene sobre la división sexual del trabajo, que le dice a la mujer que debe dedicarse al cuidado de los hijos en contraposición con el varón que es el proveedor”, acota la Coordinadora de Incidencia de Oxfam en Bolivia.

FACTORES

Se toma en cuenta también otros factores que están relaciones con el tiempo que le dedica la mujer al cuidado que no es remunerado y que, por lo general, comienza luego de salir de la oficina y llega a su hogar para dedicarse a ello en un promedio de casi 7 horas al día o más.

“La mujer en promedio trabaja 7 horas por semana menos que los hombres de manera remunerada, porque se dedican al cuidado, lo que incide en la posibilidad de estar ocupadas en un trabajo permanente, que les permita ganar un mayor salario. Un tema que no sólo afecta al momento de comenzar a trabajar, sino a lo largo de su vida”, destaca Paz.

Según la ejecutiva de Oxfam, las tazas de ocupación laboral de mujeres que tienen un hijo es mayor de aquellas que tienen de 2 a 3 niños y, más aún, si son pequeños. Lo que se constituye en una barrera para su inserción en el mercado laboral y en su participación en la política, entre otros temas.

“El machismo es la causa principal para que la mujer no trabaje y peor aún participe en la política en el territorio nacional, un pensamiento que está presente en casi todas las edades. Salvo un grupo de jóvenes de 18 a 25 años que tiene la expectativa de ver este cambio en el pensamiento y el deseo de hacerlo efectivo”, añade Paz.

CONCLUSIONES

Entre las conclusiones que se tiene están la construcción de un sistema de cuidado bajo las siguientes acciones:

- Reconocer la redistribución y democratización del cuidado.

- Proveer los servicios y recursos públicos para el cuidado, y supervisar los servicios privados.

- Impulsar políticas laborales que promuevan la corresponsabilidad del cuidado.

- Promover políticas y acciones orientadas a motivar cambios en las creencias que reproducen los roles de género y que contribuyen a la injusta distribución del trabajo.

En resumen una de las conclusiones principales del estudio afirma que, para reducir la desigualdad y garantizar la sostenibilidad de la vida, es necesario contar con una política integral del cuidado, sin la cual no se podría alcanzar un avance significativo en el ejercicio de los derechos de la mujer boliviana.