Cuerpos no identificados acopiados sin indagación

La morgue de la ciudad de La Paz continúa siendo el único ambiente, donde son trasladados los cadáveres que genera la urbe alteña, por atropellos a peatón, homicidios, feminicidios, infanticidios y todo tipo de eventos que terminan con la muerte de personas, los cuales llegan a ser amontonados sin ninguna identificación y con pocas posibilidades de concluir su investigación.

Sobre todo, el fin de semana es cuando se registra la entrega de cadáveres entre uno a cinco cuerpos por diferentes hechos que terminan con la pérdida de vidas humanas. Los cuerpos no identificados en la morgue suelen ser remitidos a fosas comunes en casos de no ser identificados por los familiares, con pocas posibilidades de que puedan ser casos investigados por la instancia policial.

Pero en el caso de la existencia de cuerpos reconocidos por los familiares, en caso de tratarse de una muerte violenta, suelen ser investigados, pero con el riesgo de que exista contaminación en las evidencias del cadáver es un riesgo que podría obstruir el proceso de una investigación.

En más de cuatro gestiones las autoridades municipales en El Alto no han logrado concluir la construcción de una morgue adecuada, donde sean remitidos todos los cadáveres que genera la urbe por diferentes circunstancias, aspecto que perjudica el proceso de investigación.

Investigadores de Homicidios lamentan que hasta el momento ninguna instancia local y sobre todo municipal se preocupe en definir la construcción de una morgue adecuada que no solo permita que se mantengan los cadáveres refrigerados, sino sobre todo permita lograr una adecuada investigación científica que concluya con la identificación de las personas involucradas en el caso de muertes violentas.

Alrededor de 20 cadáveres por semana El Alto deriva al depósito del Hospital de Clínicas, donde no responde a las condiciones adecuadas de una morgue, generando una contaminación permanente tanto a quienes deben involucrarse en el traslado de cuerpos, así como a personas que deben realizar diferentes peritajes, para establecer tanto la causa de la muerte de persona, como la colección de evidencias o indicios que permitan establecer el o los posibles responsables en la muerte.

“Las condiciones del depósito de cadáveres del Hospital de Clínicas no son las adecuadas, requiere por ejemplo un departamento de Homicidios de la Policía, por ser un ambiente totalmente contaminados donde los cadáveres están hacinados y no existe ningún tipo de refrigeración, sanidad. Por lo tanto es importante que el municipio de El Alto pueda encarar un proyecto que dote de una infraestructura destinada a la construcción de una morgue para esta ciudad”, añade Guery Cuentas perito en temas de homicidio.

La instancia de investigación que diariamente es convocada por la población a objeto de realizar el levantamiento legal de cadáver, sus investigadores, no solo corren el riesgo de contaminarse con posibles enfermedades de la personas fallecida, sino que deben recorrer con el cadáver desde el lugar del levantamiento a las oficinas de la Felcc, para luego trasladarse hasta la fiscalía, solicitar que esta instancia autorice la autopsia y una vez obtenido el requerimiento trasladarse con el cadáver al interior de una camioneta tapada con una frazada, hasta ser trasladado al Hospital de Clínicas en la ciudad de La Paz. “Este procedimiento nos dificulta porque en el proceso de trasladar el cuerpo, incluso la gente trata de oponerse al traslado, buscan quitarnos el cadáver, aspecto que ocasiona la contaminación del cuerpo que a la larga perjudicará el proceso de investigación”, explicó uno de los investigadores.

Luego de conseguir que el cuerpo sea remitido al depósito de cadáveres del Hospital de Clínicas y se obtiene el requerimiento de autopsia realizada por un médico forense, solo en horas de la tarde se consigue el cumplimiento de ese procedimiento.

“Por lo tanto una vez que llega el cadáver al depósito del Hospital de Clínicas, si no está embolsado medianamente en una bolsa que se ha utilizado 10 a 12 veces, el solo hecho de llegar a ese ambiente ya se contamina, dificultando la investigación científica”, añadió.

En la morgue del Hospital de Clínicas y los responsables de dicha entidad lamentan que de 10 cadáveres que suelen ser atendidos en algunos casos los fines de semana ocho corresponden a la urbe alteña, de los cuales solo cuatro suelen ser identificados y el resto pasa en un tiempo de tres meses a una fosa común, ante la carencia de mayores espacios o una morgue que mantenga refrigerados a dichos cuerpos.

Pese a que gran parte de los investigadores de homicidios, fueron capacitados por diferentes cursos de especialidad nacional y extranjera, dichos procedimientos no son aplicados por la ausencia de condiciones adecuadas para ese proceso de investigación en el caso de muerte de persona por causas violentas.