La exaltación extrema de los afectos y pasiones de los militantes y seguidores masistas, llega a la máxima exageración, a una inconsciente idolatría; no piensan ni razonan, envueltos en una ceguera que les impide ver la realidad del “país de las maravillas”, la ausencia de políticas estructurales estables de educación, salud, desarrollo, industrialización de los recursos naturales, minería y otros. Ahora están apresurados para solucionar y poner parches, como siempre ofreciendo sectariamente obras y acciones apuradas, tratando de evitar que les gane la lógica electoral.
Catorce años de una política que ignoró el servicio público y nunca trazó propuestas de objetivos nacionales, menos algún proyecto de visión de país o de futuro. Por el contrario, manifiesta agotamiento y debilidad, ya que por las oscuras amenazas que se plantea, agudiza los peligros de una ruptura de la democracia.
Movimiento que ya encara desgaste ético moral, al margen de las desatinadas actitudes y recurrentes desaciertos políticos, dominados por la constante improvisación, de una gestión de libre albedrío en el despilfarro, uso y abuso de los dineros del estado, lleno de engaños, mentiras e hipocresías. No acató, no se sometió al mandato del Referendo del 21F/2016, no respetó ni la voluntad ni la soberanía del pueblo. Fueron cometidas faltas contra la integridad nacional; por la actitud hormonal de Morales, perdimos la única esperanza de recuperar nuestro Litoral. Se observa envilecimiento y corrupción en niveles de gobierno; tenebroso mantenimiento y protección del Chapare, cubil de la cocaína y la consecuente vinculación gubernamental con el narcotráfico; contrabando institucionalizado que alimenta la economía de sus bolsillos, que destruye la pequeña industria y aumenta el mercado informal; contratos directos sin órgano de fiscalización, sobornos, coimas y porcentajes que van a los bolsillos de pícaros.
El nefasto contubernio con la oligarquía cruceña y algunas autoridades facilitó se dicte el decreto que sentenció a muerte a la Chiquitania, y esquilmarla después de su destrucción, cosechando cuantiosas ganancias por los más de cinco millones de hectáreas, por un ecocida, un genocida, que mató la vegetación, la fauna y toda la biodiversidad, cuántos más hechos perversos podemos citar. El centralismo indolente y totalitario ha desgraciado al país.
Solo los socialistas totalitarios por su gran utopía piensan en la posibilidad de crear un sistema político que perdure eternamente, concentrando el poder en una sola persona, sostenida y rodeada por un círculo amurallado. Así se gobierna el país, lejos de todo orden de derecho, torciendo la ley a gusto y sabor. Así fracturan la democracia, para ellos no existe Estado, poniendo en duda la supervivencia de la democracia, que significa “gobierno del pueblo”, que ahora lo volvieron en gobierno del partido político, partidocracia que está lejos de ser democrática. Se da la paradoja de que hoy los masistas defienden la democracia, lo constitucional y la soberanía, con cinismo, pero sabemos que la democracia ya cayó en la perversa demagogia de engaño, mentira e hipocresía, de la lucha de clases para ser luego sucedida por una férrea dictadura.
Un anodino personaje califica a las concentraciones de los pueblos de Santa Cruz, La Paz y Cochabamba, de una esquizofrenia (enfermos mentales), quiso decir trastornados. Imaginamos un país con esa patología, en algún momento recibirá su factura. Que los cabildos son inconstitucionales, pero el habilitarse para ser candidato sin respetar el resultado del Referendo del 21 de febrero, eso es inconstitucional. No respetar la voluntad del pueblo, pisotear la CPE, armando una trama con los órganos principales, para la aprobación y habilitación de su postulación, eso es inconstitucional. Tratar de legitimar su postulación trucha, eso es inconstitucional. Hoy, envueltos en incertidumbre, ven que el abuso del poder ha llegado a su fin, ahora la jauría están con el “rabo entre las patas”. El Quijote de la Mancha le dice a Sancho, “los perros ladran, señal de que estamos cerca”.
Del dúo de gobernantes, uno, marioneta manipulada en 14 años, olvidó su lengua, costumbres y tradiciones. El otro, “olvidó las operaciones básicas, solo sabe dividir (al pueblo)”, según una candidata; no es de clase media, menos indígena, no tiene pertenencia definida, no prestó su servicio militar, ¿qué dice la CPE al respecto? Ellos gobernaron por 14 años, qué mal se entendió el sentido de orgullo y dignidad, Dios, Patria y Honor.
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