Ante conflictos en el país
La misiva enviada por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) a su similar Integración Energética Argentina (IEASA) sobre la posibilidad de reducir o interrumpir los envíos por la crisis política en el país, el vecino país ya baraja tres alternativas para abastecerse. Brasil también observó con preocupación la situación de Bolivia, y por ello toma medidas para evitar la falta de gas natural en su mercado, y busca alternativas de abastecimiento, y una de ellas sería la importación de LNG. Por su parte, el Gobierno argentino evalúa una serie de alternativas para superar una probable falta de provisión de gas.
Según pudo confirmar la agencia NA, desde la empresa Integración Energética Argentina (IEASA) se analizan tres posibilidades para resolver este inconveniente: recurrir a las reservas de gas natural licuado almacenado en la terminal de Escobar, retomar las importaciones a través de Chile o incrementar la provisión doméstica desde el sur del país.
El gerente de la compañía YPFB, Marcelo Laura Guarachi, en una carta enviada a Claudia Liliana Mundo, presidenta de la firma estatal IEASA, anunció la posibilidad de interrumpir la inyección de gas natural por la toma de plantas de hidrocarburos. De todas maneras, funcionarios del organismo estatal señalaron que hasta el momento no se registraron inconvenientes en la importación de gas natural por parte de YPFB.
Una comisión integrada por funcionarios de la Secretaría de Energía, IEASA, el Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) y la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) se encarga de controlar el suministro y decidir medidas en caso de que esa provisión desde Bolivia sufra interrupciones. Bolivia abastece actualmente al país con 10,5 millones de metros cúbicos por día (mm3/d), los cuales brindan suministro a los clientes del norte argentino, en especial a distribuidoras y a las usinas de generación eléctrica.
En la carta, Guarachi escribió que por la creciente convulsión social que se está presentando en Bolivia, grupos de personas tomaron el campo Carrasco y Estaciones de Bombeo y Compresión de hidrocarburos más cercana. El campo Carrasco se encuentra ubicado en la provincia del mismo nombre del departamento de Cochabamba, en la región tropical del departamento (conocida como el “Chapare”), a 174 kilómetros al este de la ciudad de Cochabamba y a 230 kilómetros de la ciudad de Santa Cruz.
Claves para entender la crisis de Bolivia con ojos argentinos El directivo boliviano señaló además que por el creciente conflicto “no se descarta” la toma de otras instalaciones de producción o transporte de gas natural, lo que podría afectar claramente la provisión del combustible. En ese sentido, YPFB está con “limitaciones” para operar, aunque según Guarachi la firma se encuentra con las empresas transportadoras YPFB Transporte, YPFB Transierra y Gas TransBoliviano S.A “realizando sus mejores esfuerzos para mitigar los efectos provocados por la situación actual”. (Fuente www.perfil.com).