Bruselas "sigue de cerca" caso de líder estudiantil belga

Bruselas.- El Ministerio de Exteriores de Bélgica aseguró ayer que "sigue de cerca" la situación de la líder estudiantil Amaya Coppens, de nacionalidad belga y nicaragüense, detenida el pasado viernes en los alrededores de Managua.

"La embajada de Bélgica en Ciudad de Panamá ha contactado oficialmente con las autoridades nicaragüenses para preguntar por la situación de Amaya Coppens, detenida en los suburbios de Managua el 15 de noviembre", informó en un comunicado el Ministerio belga de Exteriores. Agregó que el abogado de Coppens, Maynor Curtis, ha podido "contactar con las autoridades judiciales".

"Amaya está siendo interrogada sobre un asunto de interés nacional. Está detenida en el centro de detención provisional de la policía Auxilio Judicial Nacional por un período de 48 horas, en principio", añadió. Según declaró a la radiotelevisión pública belga RTBF el padre de la estudiante, Coppens fue detenida en Mayasa, a 20 kilómetros de la capital nicaragüense, donde se había acercado a una iglesia a llevar agua a "madres de presos políticos en huelga de hambre y encarcelados por la policía".

Amaya, activista que ya había sido detenida con anterioridad, fue arrestada junto a otras tres personas, agregó su padre, Frédéric Coppens. El Ministerio de Exteriores subrayó que Bruselas "otorga la mayor importancia al respeto del Estado de derecho, a las libertades fundamentales y a la sociedad civil en Nicaragua" y se refirió a las conclusiones del Consejo de la Unión Europea (UE) del pasado 14 de octubre. En aquella reunión celebrada en Luxemburgo, los ministros de Exteriores de los países de la UE enviaron una advertencia a Nicaragua al adoptar un marco legal que le permitirá imponer sanciones selectivas si se continúa recrudeciendo la crisis sociopolítica que desde abril de 2018 ha dejado cientos de muertos en el país. (EFE)