Psicóloga María Valderrama
Uno de los juegos que sugieren los expertos es el rompecabezas para los niños
La estimulación temprana es una de las labores más importantes en los primeros años de vida de los niños, porque es la principal labor educativa que desarrolla al máximo las capacidades psíquicas, motrices, emocionales y sociales de los menores, sostuvo la psicóloga e investigadora, María Valderrama. Señaló que esta labor educativa en los primeros años permite aprovechar la capacidad de adaptación y la facilidad para el aprendizaje que caracterizan al cerebro de los bebés de entre 0 y 6 años.
En esa franja de edad se desarrollan las habilidades cognitivas, emocionales y físicas que resultan fundamentales para el correcto funcionamiento biopsicosocial del menor, como el lenguaje, la memoria, la percepción, el sentido espacial, la motricidad, el razonamiento, entre otros. En esta primera etapa de vida de los niños –dijo– se forman las principales conexiones neuronales, lo que convierte al cerebro en un mecanismo cognitivo moldeable que acomodará los nuevos aprendizajes con mucha mayor facilidad que cuando, a posteriori, los circuitos encargados del aprendizaje ya se han consolidado, modificándose con mayor lentitud a medida que se avanza en edad.
En su opinión esta tara tiene la finalidad de que los hijos puedan controlar sus movimientos (motricidad fina y gruesa), regule sus emociones, desarrolle o potencie su capacidad intelectual y se desenvuelva con una autonomía en su entorno social. A continuación daremos algunas recomendaciones sobre la estimulación temprana.
EJERCICIOS DE CONCENTRACIÓN
La educadora Sonia Esquivel Lozano explicó que una dinámica puede estimular y mantener a los hijos concentrados. “Uno de los juegos útiles para alcanzar este objetivo son los rompecabezas, que ayudan a desarrollar la inteligencia espacial y la atención; éstos atraen la atención del niño desde principio a fin, puede ser que se levante un par de veces, pero luego regresará para terminar lo que en algún momento empezó”, dijo. Los rompecabezas contribuirán a solucionar los problemas de atención y mejorar la memoria del niño o niña, siempre con la supervisión de los padres.
LECTURA DE CUENTOS
Recomendó que entre las dinámicas más divertidas que mantienen la atención del niño o niña se encuentra en la lectura de cuentos, actividad que promueve la capacidad de concentración y desenvolvimiento, habilidades importantes para lograr importantes resultados en la escuela. “Esta actividad debe ser motivada con la ayuda de los padres, se trata de que los progenitores lean junto a los niños o niñas, debemos hacer una costumbre y un hábito de la lectura”, agregó. Los padres deben estimular la lectura sin obligar ni forzar a sus hijos, pueden hablar de historias de interés de los niños y motivarlos a conocer más de estos temas.
SEPARANDO ELEMENTOS
En opinión de María Valderrama, la separación de elementos es otra propuesta para estimular la concentración, para ello se debe reunir una cantidad de objetos con características diferentes, como el color, tamaño y forma para luego mezclarlos, para que el niño o niña proceda a ordenarlos correctamente. La tarea del niño será clasificar los objetos según sus características. Para ellos los niños deberán poner mucha atención a las particularidades de cada elemento, lo que estimulará su concentración, destreza y salud mental.
ENTRENA SU EQUILIBRIO
También son importantes –indicó- los ejercicios de equilibrio, anima a tu hijo a ponerse de puntitas para fortalecer sus pies. Esto se puede hacer mientras bailan la tonada que más le guste al pequeño. Mediante la realización de este ejercicio los hijos, además, de fortalecer sus pies, entrenan su equilibrio y concentración, lo que favorece su psicomotricidad gruesa. “Bailar de puntitas y hacer movimientos con cada parte del cuerpo le ayuda a los niños y niñas a tener un mejor dominio espacial y de su cuerpo”, dijo.
DIBUJO LIBRE
Indicó que tener, al menos, una hora de dibujo libre en casa es sumamente enriquecedor para el pequeño, debido a que los niños o niñas podrán entrenar su motricidad fina (dedos de la mano) al elegir y agarrar los colores. Además, el dibujo desde la psicología es una gran herramienta para que los niños expresen y manejen sus emociones de forma adecuada. Los padres pueden conversar con el niño sobre el dibujo o también hacer un dibujo juntos, esto realmente es agradable para él. Los padres deben informarse sobre la estimulación temprana y conocer más ejercicios claves para reducir en el niño la inquietud motriz y la impulsividad, que suelen ser las principales fuentes de problemas. Las actividades de estimulación nos ayudan a través del aumento de la atención y el aumento de su capacidad cerebral.