Desde que el expresidente Evo Morales renunció a su cargo y se fue como asilado político a México, ha incrementado su tendencia patológica a transformar la realidad o mentir.
En los dos últimos contactos con la prensa de ese país emitió dijo por lo menos tres mentiras demostrables. Utiliza re forma recurrente la frase “nunca miente” o “con mucha sinceridad”. El expresidente dijo que él escuchaba la canción Lamento boliviano del grupo argentino Enanitos Verdes cuando era niño y vivía en la comunidad orureña de Orinoca, donde nació.
Quiero decirles con mucha sinceridad, con absoluta transparencia. Cuando yo era niño de la escuela, mis profesores me hacían cantar lamento boliviano”, dijo ayer Morales. Sin embargo, dicha canción fue reeditada por esa banda de rock en 1994, 10 años después de que fuera compuesta por Dimi Bass (Raúl Federico Gómez) y Natalio Faingold (ambos integrantes de Alcohol Etílico) en 1984.
En cualquiera de esos dos años, Morales –nacido en 1959– no era niño, pues en el primero tenía 35 y en el segundo, 25. También presentó un video titulado “El Gobierno golpista de Áñez» y expuso una agresión policial que tuvo lugar en la plaza Tres Culturas México DF, el 3 de octubre de 2013. Morales mostró ese material para hacer creer que el hecho sucedió en Bolivia.
Otra muestra de su mitomanía es que en una entrevista con la BBC, atacó al periodista del medio cuando éste le recordó que antes que llegara a México, en Bolivia dijo que llamaría a elecciones “incorporando a nuevos actores políticos». «Por favor, por favor, no me trate de mentiroso (...) No te acepto eso. El domingo en la mañana hice una conferencia de prensa, textualmente: «No hay ningún problema, nuevas elecciones, con nuevo Tribunal Supremo Electoral y sin Evo Morales ». Eso planteamos el domingo en la mañana, a las siete, ocho de la mañana», aseguró. Sin embargo, su declaración del domingo 10 no menciona la frase “sin Evo Morales”.