Almte. (sp) Jorge Botello Monje
Con el fin del gobierno de Morales se notó un cambio, inmediato, en la actitud de jueces y fiscales frente a diversos procesos. Cambio tan evidente y repentino, además de coincidente, siembra dudas sobre la corrección de las nuevas determinaciones judiciales y su posición frente al nuevo ejecutivo.
El anterior gobierno sometió, a algunos de sus opositores, a abusos y persecuciones; mientras sus correligionarios, sin importar las normas legales, se habrían favorecido con su protección, hasta el punto que uno de ellos, según la prensa, “inventó” un pueblo para agenciarse dinero, a costa de esa población fantasma.
La arbitrariedad la practicaron, además del gobierno, individuos que por ejercer algún cargo, pretendían hacer de las suyas; me viene a la memoria una fiscal que vivía sin pagar alquileres. El ilegal y abusivo accionar trastocó el ordenamiento jurídico y a su sombra no habrían vacilado, jueces y fiscales, en encarcelar inocentes, o liberar culpables para mantener sus cargos, causando inmenso daño, no solo al directamente afectado, también a sus familias, ¡qué terrible posibilidad!
Con el nuevo gobierno, políticos que dejaron el país eludiendo la persecución del régimen están retornando, creando incertidumbre sobre su situación judicial, pues el solo hecho de aducir una real o supuesta persecución política, no es motivo suficiente para sustraerse a las demandas que en su momento hubieran sido presentadas y que deben ser aclaradas por la justicia, esta vez bajo severo escrutinio, no únicamente de las jurisdicciones pertinentes, sino del conjunto de la sociedad. Así se evitará que eventuales culpables se salgan con la suya escudados en dicha persecución.
Por otro lado, en el actual escenario, en el cual se supone desaparecieron las presiones sobre el Órgano Judicial, no debieran quedar sin sanción los administradores de justicia que hubiesen actuado con tamaña falta de humanidad y conciencia respecto a la vida de los demás, incluso condenando a un médico inocente, condena frustrada casualmente. Casos como este no pueden ser olvidados y las autoridades, que están haciendo que se reabra casos de delitos que en su momento no fueron procesados, deben hacer que los malos jueces, fiscales y otros funcionarios, sean juzgados de acuerdo a como establece la ley, prestigiando nuestra justicia.
Se intentó modificar el Código Penal, el proyecto fue desechado por las múltiples críticas y observaciones que recibió, lamentablemente no fue reemplazado y nada más se hizo para mejorar el sistema judicial, dejando que malos operadores de la justicia puedan actuar en función de sus expectativas de enriquecimiento o para favorecer a sus simpatías políticas. Tal vez sea oportuno intentarlo nuevamente.
Se impone aplicar importantes cambios en la administración de justicia, de manera que en el futuro no sea tan fácil que los poderosos se apropien de ella ni a sus operadores vender sus conciencias.
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |