90 años depués

El que más y menos ingresó a sus instalaciones, sea en la primera construcción o quizás en esta última y en el tiempo el nombre se mantuvo “Hermando Siles Reyes” (también conocido como Olímpico), de las dos que ya se edificaron y que hoy es un monumento.

Además de ser el escenario que más actividad tiene en el país y donde se vieron derrotas y triunfos del fútbol boliviano o quizás la inauguración de los Juegos Bolivarianos, Sudamericanos y varios torneos internacionales.

Cuando se dio la apertura del estadio “Hernando Siles Reyes”, cuyo nombre quedó en el registro del 31.º presidente de Bolivia (1926 - 1930) y que nunca fue cambiado, se había decretado un feriado paceño para el jueves 16 de enero de 1930.

Luego de varios preparativos y obras en medio, se había programado el primer encuentro que daría paso a miles de partidos que hasta la fecha se han jugado. En esa oportunidad The Strongest venció a Universitario por 4-1 en el encuentro inaugural, aunque para ese tiempo nadie sospecharía que el lugar sería un ícono para el deporte y la imagen a nivel internacional.

El estadio conocido en el mundo, fue diseñado por el maestro arquitecto Emilio Villanueva Peñaranda, quien buscó plasmar la esencia misma de nuestra cultura como ser la Tiwanacota, centrando su atención en la fachada o frontis, dándole un toque cultural en la actividad deportiva, aspecto innovador para su tiempo y que en cierta forma revolucionó las construcciones.

Villanueva (1882-1970), diseñó el Hospital General de la zona de Miraflores, la ubicación y orientación de la Avenida Camacho con vista panorámica al Illimani, fue idea suya. Tendencia que en las próximas cuatro generaciones seguirían en sus construcciones de la ciudad de La Paz. Planificó el barrio de Miraflores con la hermosa Avenida Busch con un remate impresionante en la plaza Villarroel, aunque fue tapado por el teleférico, porque ya no se ven las graderías que daban paso a la plataforma de la plaza y moriría a la vista, tampoco se advierte el panteón de los restos de Villarroel.

Su estilo de arquitectura, estuvo inspirada en una de las culturas más antiguas de América la tiwanakota, que nada tiene que ver con Aymaras y Quechuas. En algunas publicaciones la identifican como andina

El visionario profesional, fue el Primer Ingeniero Municipal, en homenaje a su labor la Plazuela del frontis del municipio lleva su nombre y donde proyectó el nuevo radio urbano paceño y ganó el el concurso público para el diseño del Hospital General (Clínicas) y que hasta la fecha y en un 90% se mantiene de pie, no se hicieron muchas modificaciones. Por esas épocas también diseña el primer edificio de La Paz de la Universidad Mayor de San Andrés que se mantiene con sus rejas exclusivas, consecutivamente nombrado como Rector.

EL ESTADIO

El diseño de la primera construcción del estadio, tenía un frontis con símbolos Tiwanacotas, logrando mimetizar el color a las ruinas que impresionaron a los paceños y al mismo arquitecto y se dejó persuadir con los tonos tierra. La entrada al estadio era un atrio gigante para concentrar a los fanáticos del fútbol, atletismo y un buen número de prácticas deportivas que dieron lustre a los atletas. Al margen de la cancha con césped y de atletismo, el antiguo contaba en sus instalaciones internas una piscina reglamentaria, y la desaparecida cancha de básquetbol.

En el atrio, es donde se ubicaban las primeras vendedoras, que hacían como un Callejón de entrada en dirección a las boleterías para que los hinchas consuman sus productos y es ahí dónde nació Las Velas con las primeros comerciantes y con la construcción del segundo y el actual estadio, fueron reubicadas en otro lugar hasta radicar en la Avenida Bolívar.

PLAZOLETA O TEMPLETE

Pero a la antesala al atrio y estadio, era la plazoleta o templete con la bellísima obra de arte de la cultura Tiwanacota, la ubicación del monolito Bennett ubicado al medio del frontis del estadio que visualmente en perspectiva da una profundidad visual.

Estaba al frente del frontis y aunque formaba parte del diseño de Villanueva, era innegable advertir la intención del arquitecto.

Fue el diseño y planificación de Villanueva que le dio vistosidad a la zona de Miraflores y como premio a su labor debería llevar su nombre como barrio Villanueva, incluso existen algunas casas que fueron diseñadas por él.

Entre 1974-75 y durante al gobierno dictatorial militar del Presidente Hugo Bánzer Suárez, comprometió la realización de los VII Juegos Bolivarianos para 1977 y el ´78 los Juegos Cruz del Sur (hoy Odesur), el mismo que se fundó en Bolivia.

A raíz de este compromiso se renovó el estadio, con mayor capacidad para albergar a los espectadores, ya que estaba programada la inauguración del evento en el nuevo escenario.

El primer estadio resistió casi medio siglo, hasta que a fin de los años setenta, y con motivo de los Juegos Deportivos Bolivarianos y Juegos Cruz del Sur, se decidió la segunda construcción, en una una superficie de 40.000 m² aproximadamente.

Intentó ser vetado por algunas selecciones sudamericanas, bajo el pretexto de su altura, sin embargo el escenario se encuentra a una altitud de 3.574 metros sobre el nivel del mar, haciéndolo uno de los estadios profesionales más altos, pero que existen otros más altos en el mundo.

UNA HISTORIA LLENA DE EMOCIONES Y DERROTAS

La mayoría de los partidos de futbol de la selección de fútbol se jugaron en este estadio con triunfos y derrotas y actualmente es el principal para ese cometido y la excepción no será las eliminatorias de Qatar a jugarse este 2020 también se disputarán los partidos en Miraflores.

Quizás, recordar que el primer encuentro del fútbol como local por la clasificación a un mundial se jugó el domingo 29 de septiembre de 1957; cuando Bolivia derrotó a Chile 3-0, y aquel primer gol boliviano fue anotado por el jugador Ausberto García.

Tras la modernización e inauguración del estadio en los años ´70 se jugó un partido poco usual entre Bolivia-Hungría, algo así como un repechaje, donde el seleccionado perdió 3-2 el 30 de noviembre de 1977.

NO ES EL MAS ALTO DE SUDAMERICA

Con sus 3577 m.s.n.m., el estadio “Hernando Siles Reyes” es uno de los escenarios con más altitud del continente. Existen otros escenarios deportivos construidos en mayor altura como el de Cerro de Pasco en el Perú a 4.338 m.s.n.m. Le sigue el estadio municipal de la ciudad de El Alto con 4.082 m.s.n.m entre otros.

QUEDAN LAS FUNDACIONES DEL PRIMER ESTADIO

Para la segunda construcción (actual) se mantuvieron las estructuras principales de las curvas norte y sur, recta general. Pero lo que cambió completamente fue el frontis destruido por la empresa encargada de la edificación, contrariamente se construyó un armazón de fierro y concreto, que sigue soportando la bandeja alta del sector de preferencia.

DERROTAN A BRASIL 1993

Como datos para recordar fue la derrota inapelable de Brasil, que por primera vez en una fecha de eliminatorias mundialistas Bolivia le ganó por 2-0, cuando Marco Antonio «el diablo» Etcheverry y Álvaro Peña sellaron la historia de los “cariocas” que salieron más frustrados del campo de juego, cuando el arquero Clauido Taffarel de Brasil no quiso hablar con la prensa nacional por el duro revés de la derrota.

BOLIVIA AL MUNDIAL

Los bolivianos pudieron festejar en el estadio a viva a voz todos los partidos programados por FIFA de las eliminatorias de 1993, los triunfos le permitieron clasificar al Mundial de Estados Unidos con méritos propios y por primera vez.

Destacar que los cotejos tuvieron resonancia por la calidad del rival que en esa oportunidad presentaron, cuando Bolivia, ganó por 2 a 0 a Brasil el 25 de julio de 1993. Luego 3-1 a Uruguay, 1¬-0 a Ecuador y 7-0 a Venezuela. Esos resultados llevaron a la clasificación del mundial de 1994.

Mientras que en 1997 consiguió el subcampeonato de la Copa América trás imponerse sucesivamente a Venezuela, Perú, Uruguay, Colombia y México. El partido final del torneo, jugado el 29 de junio no le fue nada favorable y perdió por 3-1 frente a la selección brasileña.

Se jugaron miles de partidos entre encuentros nacionales e internacionales además de otros eventos extraordinarios como la acogida de grandes cantantes y grupos del exterior, festivales, torneos de atletismo, maratones y otros, En el fútbol.

EDUARDO FLORES

Si de méritos hablamos, hay que reliever la gran labor del administrador Eduardo Flores, que virtualmente le dedicó a cuidar el escenario toda su vida y celosamente junto a los obreros que le dieron lustre para muchos acontecimientos. wLuego de tantos años, Flores continua en ese cargo y debe ser unas de las pocas personas que conoce los recovecos del estadio más importante de Bolivia, además de su historia y el personal que pasó por estas instalaciones.

Se ganó el respeto de los periodistas deportivos, directores del SEDEDE que pasaron por esta entidad, trabajadores, vivanderas y visitantes del interior y exterior del país.