Aislamiento y calles vacías
> Shanghai tiene 24 millones de habitantes y es una de las regiones más comerciales de China, situación que ha llevado a las autoridades y ciudadanos a tomar previsiones para que la enfermedad viral no llegue a la ciudad
Si digo la verdad, la idea de encerrarme en casa y no ver a nadie durante días no es algo que me asuste. De hecho suena genial. Pero no esperaba que fuera bajo estas circunstancias, y espero que todo termine más temprano que tarde.
Todos conocemos este virus misterioso surgió en Wuhan, provincia de Hubei desde hace algunas semanas, pero de alguna manera nadie estaba muy alarmado hasta la semana pasada. Ahora es justo decir que la mayoría de las personas en China están bajo algún tipo de arresto domiciliario autoimpuesto y que las calles de Shanghai, generalmente llenas de turistas en esta época del año, son ecos vacíos de un pasado aparentemente distante.
Todos los días recibo un mensaje de texto, en chino, de mi proveedor de servicios de telecomunicaciones. Hace unos días me recordó reducir las visitas a amigos y familiares (es común visitar a seres queridos y desearles suerte para el año nuevo), usar una máscara afuera, lavarme las manos regularmente, ventilar bien mi hogar y buscar asistencia médica, sí me da fiebre
En los últimos días, ese mensaje de texto comenzó a llegar de la comisión municipal de salud.
Ahora también me dijeron que me quite toda la ropa al regresar a casa desde el exterior y que airee esa ropa al sol y al viento. Por la mañana debo doblar mi ropa de cama después de airearla para esterilizarla. Mi casa debe desinfectarse regularmente.
Así que me encargué, a pesar de las supersticiones en torno a no lavar la buena suerte del año nuevo limpiando su casa demasiado pronto después de ingresar en un nuevo ciclo lunar, para ordenar mi apartamento y desinfectar tantas superficies como sea posible. Odiando el sonido de la aspiradora, mis dos gatos rápidamente tomaron su segunda posición favorita mirando hacia las calles ahora vacías.
Están acostumbrados a quedarse encerrados en casa todos los días, así que para ellos esto no es nada nuevo.
También están cubiertos con su pelaje de invierno, por lo que la brisa fría que pasa rápidamente por mi apartamento generalmente cálido tampoco los elimina.
AVENTURARSE AFUERA
A pesar de las firmes sugerencias del gobierno de permanecer en el interior y reducir el contacto con otras personas tanto como sea humanamente posible, hubieron algunas ocasiones en que salir de casa es inevitable.
El primero es primordial: necesitamos comer. Si bien muchos están optando por ordenar sus frutas y verduras frescas en línea y recibirlas, prefiero ver lo que compro primero con mis propios ojos.
Me sorprendió un poco cuando visité dos supermercados y un mercado local de frutas y verduras para encontrar un poco de oferta. Un supermercado presentaba estantes vacíos donde la semana pasada se podían ver todos los colores brillantes del arco iris. Faltaba mucha carne fresca en los tres lugares: solo un supermercado tenía carne, e incluso entonces la mayoría de los estantes estaban vacíos.
Otra es mantener las existencias de máscaras faciales. Es absolutamente esencial, siempre que esté afuera, usar una máscara N95, que me parece demasiado restrictiva e incómoda, o una máscara quirúrgica para reducir significativamente las posibilidades de infectarse. Pero las máscaras son escasas, a pesar de que las 17 fábricas de máscaras de la ciudad bombean millones a diario. Shanghai tiene una población de 24 millones, pero la gente está asustada. (Reuters)
QUÉ PASA HOY
La situación en China sigue siendo precaria. Todos esperan que el gobierno pueda detener la propagación de este coronavirus a través de medidas duras como cerrar ciudades y restringir el movimiento.
Algunas de esas medidas incluyen el movimiento sin precedentes de extender las vacaciones del año nuevo lunar, cerrar todos los espacios públicos populares como museos, cines y puntos turísticos, e insistir en que las personas trabajen desde casa.
Pero incluso en el mejor de los casos actuales, esto podría durar meses. Algunas aerolíneas ya comenzaron a cancelar todos los vuelos dentro y fuera no solo de la provincia de Hubei, sino de toda China continental.
Los gobiernos extranjeros están alquilando vuelos especiales para evacuar a sus ciudadanos de Wuhan, el epicentro del brote del virus.
Aún no quiero pensar en el peor de los casos, pero tengo esperanza. Si algún gobierno puede implementar con éxito lo que un experto llamó medidas "draconianas" para detener esta propagación, es el gobierno fuerte y central de China.
Tomaré cada día como viene, y espero que mis gatos no se acostumbren a que esté en casa todos los días.
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