Madre e hija recibirán terapias psicológicas

La Defensoría de la Niñez y la Adolescencia (DNA), anuncia terapias psicológicas para la madre a la que arrebataron a su bebé y la pequeña víctima de este hecho, que sucedió el pasado viernes en un hospital de la zona de la extranca de Río Seco, según la trabajadora social, Jenny Velarde.

Luego de aproximadamente tres días, la bebé fue abandonada por su raptora en la puerta de una licorería de la zona de Villa Adela, donde la autora de este hecho dejó una carta de arrepentimiento, por su actitud asumida, pidiéndole perdón a la madre de la menor.

Las circunstancias en las que Miriam, madre de la menor, dejó a su bebé fue cuando esperaba atención médica en el Hospital del Norte de El Alto, quien aseguró que la autora del ilícito se ganó su confianza en una conversación y la dejó por unos minutos mientras se dirigía al baño, actitud aprovechada por la desconocida que escapó llevándose a la menor.

Uno de los principales motivos por el cual se ha decidido la ayuda en este sentido, según la funcionaria de la DNA, es que la madre de la menor raptada tiene solo 18 años de edad y es una madre primeriza, por lo que su inexperiencia en este tipo de problemas podría haberla afectado de forma emocional como psicológica.

"El haber perdido a su hijo, aunque por algunos días, esta madre de 18 años no fue nada fácil asumirla, por lo que se ha decidido efectuar este trabajo con ella y de la misma manera con la pequeña de su hija, quien por la corta edad que tiene recibirá un tratamiento muy distinto y especial, y de esta forma lograr que ambas puedan volver a la vida normal sin los perjuicios ni el miedo de que en algún momento nuevamente puedan ser alejadas", explicó Velarde.

Con relación al progenitor de la menor la defensoría señaló que será citado, debido a que al no hacerse responsable de su hija, esta actitud podría ser catalogada como abandono así como a la madre misma, por lo que deberá hacerse responsable de su hija.

"Lo que estamos haciendo es investigar los pormenores de la situación del padre de la menor, porque así como señala la madre, el progenitor, hasta la fecha no se ha hecho responsable desde el nacimiento de su hija, por lo que de acuerdo a Ley tiene la obligación de pasar una asistencia familiar, por lo que se trabajará en este sentido con el equipo de abogados que tenemos en la DNA", señaló la funcionaria.

Mientras que otro de los temas que será estudiado por los abogados y la psicóloga, será el entorno familiar de la madre y su hija, debido a que ambas viven junto a los padres, donde luego de un estudio que se ha realizado tuvieron que retornar a este seno familiar, que sería la familia ampliada, como son los abuelos de la bebé y los padres de Miriam.

Sin embargo, se ha podido conocer que este tema será sujeto a un estudio, con la finalidad de que se pueda establecer las garantías de un buen ambiente para la menor y el calor humano que recibe de este entorno y las condiciones en las viven.

"Nosotros lo que en estos casos hacemos es verificar el entorno familiar de la menor en este caso raptada, porque además sabemos que el padre de la menor no vive con ellos, por lo que también cuenta con una familia ampliada que serían los abuelos de la menor, pero se tiene que conocer y garantizar que sea un hogar estable para la menor", finalizó Jenny Velarde de la DNA.