Vaticano.- En una de las decisiones más significativas de su pontificado, el papa Francisco rechazó ayer una propuesta para permitir que algunos hombres casados puedan ser ordenados en la región amazónica para aliviar una aguda escasez de sacerdotes.
La recomendación, presentada por obispos latinoamericanos el año pasado, había hecho saltar las alarmas entre los conservadores en el seno de la Iglesia Católica, que temían pudiera provocar un cambio en el secular compromiso al celibato de los sacerdotes.
Francisco presentó su respuesta en una exhortación apostólica, tres meses después de que la propuesta fuera aprobada por 128 votos a 41 en un tenso sínodo de obispos celebrado en El Vaticano.