La inteligencia artificial ya es capaz de crear arte y literatura; sin embargo, no se ha resuelto cómo proteger la autoría de las obras desarrolladas por las máquinas que pueden inventar un retrato inédito al estilo de un maestro, tal es el caso de la pintura presentada como el nuevo Rembrandt.
Hace unas semanas, un tribunal de China concedía a un artículo creado por una máquina operada por inteligencia artificial los mismos derechos de autor que si lo hubiera escrito una persona. Por este motivo, decidió multar a una empresa por usar el texto sin autorización. Según la sentencia, la estructura lógica y el estilo original del texto lo hacía protegible a través del copyright.