“Siempre profesoras”

En diciembre de 2019 se conoció que 2 instructores de taekwondo que trabajaban en las instalaciones del Estadio Hernando Siles de la ciudad de La Paz, dependiente de la Gobernación del departamento de La Paz, habrían cometido “abuso sexual” con una deportista de 15 años de edad, quien ya realizó la querella ante la Fiscalía de La Paz. Este febrero 2020 ya se aprehendió a uno de los instructores para enviarlo a Chonchocoro, pero su hermano todavía se halla prófugo. Gracias a Dios, la fotografía del prófugo ya se halla en todas las redes sociales, publicación que, aunque no se crea, “algunas fiscalías”, no permiten, logrando que el criminal o delincuente pueda huir a otro país y su extradición pueda durar varios años.

No se sabe si la Gobernación de La Paz, ya se pronunció al respecto.

Una deportista ya con 25 años de edad reconoció también, que hace más de una década habría sufrido el mismo ataque, por los 2 mismos instructores y se llegó a la conclusión de que estos ataques los habrían recibido varias atletas durante ya 12 años.

Y todo esto nos lleva a recordar primero el “caso del bebé Alexander” y luego el legendario “caso Patricia”.

Debemos asegurarnos de que las “entidades estatales” nos den a la ciudadanía las “seguridades del caso”, en los últimos tiempos se ha visto a una alta autoridad de educación comprometida en casos de corrupción, a alguno que otro notario de “fe pública”, falsificando firmas de ancianos, para apoderarse de sus bienes, etc.

Y es que hasta existe la famosa “Ley Avelino Siñani” de “educación”, nos imaginamos elaborada por las mentes más notables relacionadas con la educación boliviana, ¿y esta ley qué solución nos plantea para estos casos? Para el colmo, la segunda o tercera autoridad en educación de Bolivia, en las últimas semanas fue aprehendida por cargos de corrupción, ¡nos imaginamos que esta autoridad en la actualidad es el segundo o tercer “cerebro en el rubro de la educación” existente en Bolivia en este 2020!

Buscando “soluciones definitivas” para estos delitos, dentro del “sistema educativo boliviano”, se puede plantear que “absolutamente todo el personal” (profesores, médicos, instructores, porteros, etc.), que atiende a “los menores de 18 años”, en escuelas, orfanatos, etc., en Bolivia sea “femenino”.

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