Equilibrio e incentivos son prioridades en negocio del gas

Una reducción de las reservas de gas, una revisión de los contratos de exportación, así como la atención al mercado interno, empujan a las autoridades a revisar las políticas respecto al sector hidrocarburos y, por ello, expertos recomiendan equilibrio, institucionalidad e incentivos para aumentar los volúmenes del energético y mejorar el negocio, según se percibe de las conclusiones del panel de la “nacionalización” a la importación de hidrocarburos.

El trabajo de Isabel Chopitea, Susana Anaya, Teresa Yrigoyen y Célica Hernández, sobre el sector de hidrocarburos, presentan un escenario poco alentador sobre la principal fuente de ingreso para el país, en especial cuando no se recuperan las reservas de gas, más todo lo contrario, bajaron a la cifra de 8,95 Trillones de Pies Cúbicos (TCF).

El documento presentado mostró que los fondos del incentivo creado con parte del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) alcanzaron a 19 millones de dólares, cuyos recursos no fueron desembolsados.

Ese incentivo fue creado para aumentar tareas de exploración, en especial, y explotación, sin embargo los resultados esperados no llegaron, como fue el pozo Boyuy, en Tarija, que llegó a alrededor de 8.000 metros sin resultados.

A pesar de que el exministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, dijo que había un mar de gas, situación que fue criticada en el panel organizado por la Fundación Jubileo, y calificada de irresponsable.

IMPORTACIÓN

Por una parte la menor demanda de gas provocó menor producción de líquidos y reducción de la oferta de combustibles al mercado interno, por lo que era inminente la importación de combustibles, que en 2019 llegó a 794 millones de dólares.

Aunque en el segundo informe del sector de hidrocarburos, el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Herland Solíz, aseguró que la compra de diésel y gasolina bajaron debido a la producción de líquidos, y también por el menor precio del crudo en el mercado internacional.

Soliz informó que en enero se bajó la importación de diésel de 764 millones de dólares a 425 millones, en febrero de 740 a 473 millones y se estima en marzo bajar de 861 a 613 millones. La producción de gas natural llegó a 46,7 millones de metros cúbicos día (MMmcd) el 2019, cifra lejos del 2014, que fue de 61,3 MMmcd, mientras que YPFB señaló que para la presente gestión se espera llegar a 51 MMmcd.

CAÍDA DE RECURSOS

Parte de la presentación señala que la caída del valor de las exportaciones de gas natural ha afectado a la balanza comercial (2012 registraba un superávit de 3.401 millones de dólares, en tanto que 2016 un déficit de 1.305 millones. A noviembre 1919: 740 millones de dólares, según datos del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas.

La presentación de las investigadoras señala que la renta petrolera de 2006 a julio de 2019 alcanzó a 38.651 millones de dólares, y 2013 y 2014 fueron los años en que mayores recaudaciones se perciben.

También señala que la participación de YPFB en utilidades generadas por empresas bajo contratos de exploración y explotación, sumó 6.181 millones de dólares entre 2007 a 2019.

ESCENARIO

El documento informa que de los contratos de operación resultantes de la migración (D.S. 28701) de nacionalización de los hidrocarburos, actualmente sólo un (1) Contrato de Operación firmado bajo el marco normativo de la Ley N° 3058 continúa en fase de exploración adicional. El resto de las áreas que se encontraban en fase de exploración fueron devueltas o concluyeron los periodos de exploración sin éxito.

La mayoría de los resultados exploratorios exitosos de los Contratos de Operación provienen de proyectos en áreas en explotación.

Las 12 áreas sujetas a los dos Contratos SAM, firmados el 2008 con Pdvsa de Venezuela, fueron estudiadas pero no lograron alcanzar descubrimientos comerciales, por lo que fueron devueltas a YPFB en 2016, Timboy y Lliquimuni.

A eso se debe sumar que las inversiones en explotación superaron a las de exploración, como muestra el documento, al indicar que en 2016 se destinaron para el primero sólo 21,66 % y el segundo recibió 78,31 %. Mientras que las inversiones de YPFB son principalmente en sísmica regional para incrementar la información en áreas poco estudiadas. No son propiamente proyectos de exploración y explotación.

EXPERTOS

Por su parte, el analista del sector de hidrocarburos Hugo del Granado dijo que hay que buscar el equilibrio en el sector de hidrocarburos, es decir que tanto el Estado como los privados puedan lograr sus metas o ganancias.

Dijo que en el gobierno de Sánchez de Lozada se fue al extremo en favorecer al sector privado, mientras que en los últimos 14 años se favoreció al Estado, entonces lo que hay que buscar es un equilibrio en el que la empresa privada y el Estado reciban gane lo que tenga que recibir. Tanto la nacionalización y la privatización rompieron el equilibrio. Mientras que Mauricio Medinaceli, experto en el tema, apunto a la institucionalización del sector de hidrocarburos para un mejor desarrollo de la actividad petrolera y gasífera, y cada entidad estatal trabaje en su campo.

Señaló que el Ministerio de Hidrocarburos trabaje en una política hidrocarburífera, YPFB en exploración y explotación, así como la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) fiscalice el sector.

Para el analista de la Fundación Jubileo, Raúl Velásquez YPFB era juez y parte. También dijo que se debe buscar la forma de atraer a la inversión privada, y para ello se debería elaborar una nueva ley de hidrocarburos e incluir los incentivos.

Por su parte, Medinaceli puso en la mesa del debate el tema de la eliminación de los subsidios a los combustibles, tarea que tendrá que analizar el próximo gobierno, pero que es necesario, si lo es, debido a la actual coyuntura.

Al respecto recientemente Perú planteo al gobierno boliviano de que los camiones peruanos también puedan beneficiarse de los precios bajos del diésel en el mercado nacional. La misma se plantea en el contexto del problema que tiene el transporte internacional en el vecino país con el registro de chatas.