El coronavirus sigue arrasando
Dentellada a dentellada, el coronavirus sigue devorando el curso del tenis, que ahora pierde su torneo más carismático. Este miércoles, la organización de Wimbledon anunció que no se celebrará la edición de este año, programada del 29 de junio al 12 de julio. Después de varias semanas analizando la situación y barajando distintas posibilidades, el major británico decidió finalmente cancelar el evento a causa de la expansión del Covid-19, convirtiéndose de esta forma en el primer Grand Slam que oficialmente no se disputará. La gira de hierba, pues, también se va al garete.
Cabe recordar que hace dos semanas, Roland Garros anunció que trasladará la cita de mayo a septiembre, en una maniobra unilateral. Por el contrario, Wimbledon ha decidido después de haberse puesto en contacto con los principales entes: la Federación Internacional de Tenis (ITF), ATP, WTA y los otros tres grandes. En el All England Lawn Tennis & Croquet Club estudiaban distintas opciones, pero en ningún caso valoraban disputar el torneo sin público y el horizonte sigue siendo complicado. La epidemia también castiga con fuerza al Reino Unido —el primer ministro, Boris Johnson, dio positivo— y la mudanza a otra fecha también ha sido descartada, dada la incertidumbre.
Wimbledon es el torneo más antiguo de la historia del tenis. Nació en 1877, y desde entonces solo se detuvo durante las dos Guerras Mundiales: de 1915 a 1918, primero y de 1940 a 1945, después. Es decir, será la undécima vez que no se celebre. El año pasado, Novak Djokovic y Simona Halep fueron los campeones. (EL PAÍS)