Del coronavirus a una nueva Bolivia

El mundo vive una pandemia. Para frenar el avance del coronavirus muchos países declararon una cuarentena y aislamiento. Esta medida también está frenando a las economías del mundo. Todo esto nos hace prever una gran recesión, como la que vivió el mundo hace casi 100 años.

El coronavirus ha hecho que el mundo entero pare. Esto se traducirá en que el PIB de China (país que creció en los últimos 30 años a un promedio de 10% anual) será negativo este año; y la economía de Europa decrecerá este semestre.

Nuestro país no puede estar al margen de esta recesión. Necesitaremos de todas las medidas necesarias para superar esta economía de guerra, que bien planteadas y con un trabajo coordinado entre gobierno, empresarios y la ciudadanía en general permitirá crear la nueva Bolivia.

Como Cámara Nacional de Comercio estamos preocupados por la pandemia. Para los empresarios la prioridad son la vida y la salud de los bolivianos. Por eso apoyamos todas las medidas de la cuarentena que han sido impuestas en el país por determinación de la presidenta Jeanine Áñez. Al mismo tiempo nos permitimos sugerir la posibilidad de utilizar las instalaciones del Campo Ferial de Següencoma para instalar allí un gran centro de atención médica para los afectados por el coronavirus.

El empresariado privado boliviano está dando todo el apoyo posible para vencer esta pandemia que afecta al mundo entero y a nuestro país, que puede ser comparada con la gripe española registrada hace casi 100 años, del que pudimos salir airosos gracias a la solidaridad de todos y, con la gracia de Dios y la Virgen de Copacabana, ahora también saldremos victoriosos.

La llegada de esta pandemia ha paralizado casi todas las actividades productivas en el mundo entero, lo que derivará en una recesión económica generalizada, similar a la de 1929, cuando tuvieron que ser aplicadas medidas keynesianas, que permitieron generar liquidez para el gobierno, liquidez para las empresas y para las personas, permitiendo de esta manera que la economía se recupere.

Estamos convencidos que los golpes que recibimos como sociedad nos fortalecerán y nos deben hacer pensar en la necesidad de reinventarnos y al hacerlo tenemos que dirigir nuestra mirada y acciones hacia la economía de la digitalización, la llamada Economía 4.0, que no es otra cosa que la economía del talento.

Debemos dejar de ser un país anclado en la economía extractiva y dar el salto hacia la Economía Naranja, dando énfasis a todo lo que se refiere al turismo, la informática, la producción cultural e intelectual, y todo aquello que podamos desarrollar con el talento.

El trabajo para reactivar la economía no debe estar solo en manos del Gobierno. Es aquí donde la golpeada empresa privada -grande, mediana, pequeña y artesanal- entra en escena. Pedimos al Gobierno trabajar en forma coordinada, que es la clave para la reactivación.

Es cierto que es temprano para saber cuál será el impacto real de esta pandemia en la economía mundial y de los diferentes países, pues lo único que sabemos por los medios de comunicación se refiere a la dramática caída de las bolsas en diferentes regiones del planeta, y la caída de los precios del petróleo a niveles de principios de este siglo.

Todo lo que tengamos que hacer para salir de esta recesión mundial demandará del país entero (gobierno, empresarios de todos los niveles y trabajadores) un gran sacrificio.

El dar liquidez a todos los sectores que lo necesiten y constituir un fondo de empleo, que favorezca tanto al empleado como al empresario, demandará de por lo menos unos 4.000 millones de dólares, que significan el 10% del Producto Interno Bruto. Esta inversión requerirá del apoyo de todos.

Debemos reconocer que Bolivia está en una economía de guerra. Inmersos en esta realidad tenemos que reinventarnos para crear un nuevo país, una Bolivia solidaria con una visión enfocada en un futuro basado en la economía del talento.

El autor es Economista, empresario y ahora Presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Ph.D., miembro de la Academia Boliviana de Ciencias Económicas.