Expulsión de policías en Shinahota
Tras rechazar la expulsión violenta de policías de Shinahota, trópico de Cochabamba, y denunciar que “delincuentes” intentaron flagelar a los uniformados la noche del jueves, el ministro de Gobierno anunció que tomará las acciones legales que correspondan.
“El Comandante General de la Policía se está querellando y he ordenado que el Ministerio de Gobierno haga también las denuncias penales correspondientes. Todos estos dirigentes que además han venido alentando durante varios días, por radio, en conferencias de prensa, a que se maltrate a los policías, todos estos serán denunciados, investigados y seguramente procesados por la justicia”, manifestó.
Murillo, apuntó al Movimiento Al Socialismo (MAS) y a Evo Morales como responsables de ese hecho y afirmó que pese a la expulsión de las fuerzas de seguridad, se restaurará el patrullaje conjunto de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas.
La autoridad de Gobierno aseguró que lo ocurrido fue una vulneración a los derechos de los policías y la Constitución Política del Estado (CPE), además de un atentado a la salud por vulnerar el Decreto Supremos 4200 que decretó cuarentena total en el país para evitar la propagación del coronavirus.
“No les importa que puedan contagiarse con el coronavirus y están poniendo en riesgo a toda la población”, aseguró.
Por otro lado, Murillo informó que los policías expulsados están seguros y no presentan problemas de salud.
A su turno, el ministro de Defensa, Fernando López, afirmó que las Fuerzas Armadas están “indignadas por la humillación” que sufrieron los policías y recalcó que continuarán con la defensa a la vida de los bolivianos.
“Nosotros somos de la cultura de la paz y el diálogo y hoy más que nunca, con la pandemia del coronavirus, estamos a la defensa absoluta de la vida de cualquier boliviano. Ante esta actitud beligerante y malintencionada, la única respuesta que van a tener es que sigamos preocupándonos por la salud de los bolivianos, seguir patrullando como lo hemos hecho en todo Bolivia”, aseguró.
DATOS
La noche del jueves, cientos de pobladores del municipio de Shinahota, en el trópico de Cochabamba, agredieron y expulsaron a los policías que fueron desplegados la mañana del miércoles hasta esa región para hacer cumplir el aislamiento por el coronavirus. Restableciendo así el su trabajo que fue interrumpido en noviembre de 2019, cuando fueron violentadas sus estaciones policiales.