Shinahota
Funcionarios policiales que la noche del jueves fueron expulsados de Shinahota, en el trópico de Cochabamba, sufrieron agresiones físicas e incluso fueron víctimas de robo de sus objetos personales, informó este viernes el comandante de la Policía en Cochabamba, coronel Franz Sellis. La autoridad lamentó que los efectivos que fueron a cumplir el mandato constitucional de conservación del orden público y la defensa de la sociedad, hayan sido “atacados” y víctimas de robo de sus celulares.
La autoridad precisó que cumpliendo órdenes superiores y luego de largas negociaciones con alcaldes y dirigentes del Trópico de Cochabamba, al menos 85 efectivos policiales ingresaron la mañana del jueves a la región, para cumplir labores de control y seguridad en el marco de la emergencia sanitaria por el coronavirus.
La noche del jueves, un grupo de dirigentes de Shinahota, comenzó a agredirlos y pedir su repliegue total, bajo el argumento que su ingreso no fue consensuado.
“Los 85 efectivos policiales no representaban ningún peligro ni amenaza para la población del Trópico, fueron desplazados para cumplir su rol constitucional, específicamente de resguardo de las entidades bancarias, que deben pagar los bonos autorizados por el gobierno central”, aclaró la autoridad policial.
El miércoles, el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, afirmó que el plan de la Policía Nacional es continuar con el trabajo y los controles en todas las regiones del país, para cuidar a toda la población ante esta pandemia que no solo aqueja a Bolivia, sino a todo el mundo.
El ingreso ingresó de un contingente de uniformados se dio luego de que en el mes de noviembre de 2019, tuvieron que abandonar el sector tras que sus estaciones policiales fueron violentados.