Economía de palabras
El famoso Covid 19, el virus del que todo el mundo habla, o por lo menos al que todo el mundo teme, provoca todas las incomodidades que conocemos pero, de paso, sin quererlo, obliga a los países a ahorrar en el uso de los combustibles.
En Bolivia, el ahorro producido por la disminución de las importaciones de combustibles está ayudando a que el gobierno cubra los costos de los bonos creados para que la gente no sufra mucho con la cuarentena y la paralización de las actividades económicas.
Según dice Siglo 21, las importaciones de gasolina y diésel representaron el año pasado 129 millones de dólares por mes. Lo cierto es que la reducción del consumo de gasolina y diésel ha permitido hasta ahora, en esta pandemia, que el Estado ahorre Bs 2.100 millones.
Es un monto que viene a ayudar al financiamiento de los bonos creados hasta ahora, que costarán Bs 3.500 millones. La diferencia será cubierta, según dijo Parada, por los ahorros que el gobierno está haciendo al eliminar algunas partidas de despilfarro creadas por el actual candidato Luis Arce Catacora cuando estaba de ministro.
Por ejemplo, este señor tan dadivoso con el dinero del país dispuso que todos los ministerios cuenten con millonarias partidas de dinero para costear pasajes y viáticos para personas que eran funcionarios públicos. Es decir, un total y directo despilfarro de dinero público.
Seguramente son muchos los viajeros amigos del MAS que han quedado con los crespos hechos porque no podrán hacer los viajes que tenían planeado hacer usando el dinero de los bolivianos. Esperemos que pierdan toda esperanza de hacer esos viajes alguna vez en el futuro. Nunca más.
Según Parada, para completar el presupuesto de los bonos, ha anulado algunas otras partidas que Arce Catacora había incluido en el presupuesto para este año, y que son totalmente prescindibles porque surgieron del instinto de despilfarrador irresponsable que tiene este señor que ahora es candidato.
Nadie va a extrañar esos recursos, nadie que tenga dos dedos de frente. Y todo eso ha ido a completar el costo de los bonos que ahora los bolivianos reciben para poder enfrentar las urgencias del momento.
El candidato dadivoso o derrochador, aunque con dinero ajeno, también había destinado grandes sumas de dinero a la propaganda. Desde 2006 hasta 2018 destinó 4.000 millones de dólares a “comunicación”, es decir propaganda y este año no iba a ser una excepción.
Todo eso ha ido a parar al fondo destinado a los bonos para la gente, ahora que el país es castigado por esta nueva pandemia, que llega cuando se había ido la anterior, la del masismo.
Los bolivianos se deshicieron de la anterior pandemia en jornadas históricas. Ahora no hace falta valor para esta nueva pandemia, sino disciplina y eso es lo que está mostrando la gente, cuando todos saben que los sistemas de salud no tienen recursos debido al criterio torcido del anterior gobierno.
Siglo21bolivia.com
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |