No respetan bioseguridad
Una de las ferias más grandes de todos los días que se encuentra en la zona de Villa Dolores del Distrito 1, se ha convertido en un sector difícil de controlar por parte de las autoridades, donde el desacato y la falta de conciencia en el cumplimiento de las normas de la bioseguridad pone en peligro a la ciudadanía.
El comercio de productos de primera necesidad como verduras y frutas, instalada en inmediaciones de toda esta zona, ha dado lugar al inminente riesgo de que tanto visitantes como las propias comerciantes corran el peligro de que en cualquier momento puedan contagiarse con el coronavirus, debido a que muy pocas personas cumplen con estas normas, donde la falta de guantes, barbijos y otros no están siendo utilizados.
De la misma manera, las comerciantes no acatan la distancia social, en este caso de la distancia de cada puesto, donde la aglomeración de los mismos en varias de las calles ha dado lugar a un riesgo de contagio en cualquier momento, donde el desorden de los puestos de venta, se puede advertir en varias de las calles.
La venta de productos al por mayor, en estas calles de la zona de Villa Dolores, que se instala desde muy tempranas horas de todos los días de la semana, no puede ser controlada, ni por los propios vecinos que poco o nada pudieron hacer en un intento de exigir orden, como requisito para la permanencia de estos puestos de venta.
FALTA DE CONTROL
Uno de los problemas para que este tema continúe en este sector de la urbe alteña es la falta de control por parte de las autoridades encargadas para el efecto en esta época de la cuarentena, donde aprovechando la ausencia de en este tema las comerciantes aprovechan dichas circunstancias para incumplir, pero sin darse cuenta que ponen en peligro sus propias vidas y la de muchas personas que visitan esta feria que se realizar todas las mañanas de la semana.
“Nosotros poco o nada podemos hacer, porque el número de comerciantes que exponen sus productos en estas calles de nuestra zona, han rebasado hasta a los dirigentes que solo atinan a ver cómo muchas vendedoras a pesar de la insistencia no quieren cumplir con este requisito de salud y de esta forma hasta nosotros mismos estamos en peligro, porque ha llegado a expandirse en muchas de las calles de Villa Dolores”, dijo una de las vecinas.
De la misma forma los habitantes de este sector de la urbe alteña, denunciaron que en algún momento llegan funcionarios del municipio, son horarios donde ya no existe mucha comerciante, como en la tarde y lo poco que quedan, solo atinan a retirarles por el horario y no así en las mañanas para hacer cumplir las normas de la bioseguridad.