Califican de acertada anulación de facturación electrónica

Con la Resolución Normativa de Directorio N° 102000000011, de 18 de mayo de 2020, el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) dejó sin efecto la implementación del Sistema de Facturación Electrónica (SFE), cuya decisión es calificada de acertada por el sector empresarial, y abogan para que en el futuro llegar a consensos entre autoridades y actores, para su puesta en marcha.

“Después de realizar un análisis técnico que tomó en cuenta la actual situación económica del país, agravada por la emergencia sanitaria del Covid-19, que impide el normal desarrollo de las actividades de los contribuyentes”, el SIN tomó la determinación.

Para el presidente de la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC), Javier Bellott, la anulación de esa disposición es altamente positiva, debido a que el sistema no estaba contextualizado a la realidad tecnológica en la que viven los contribuyentes de Bolivia y, más aún, Cochabamba.

El sector empresarial está convencido de que es necesario un gobierno electrónico en el país para mejorar la eficiencia de los servicios, y la necesidad de implementar modelos de digitalización, ahora más que nunca con el tema del Covid-19, para realizar todos los trámites y gestiones ante entidades públicas y privadas.

Bellott informó que unos cuantos contribuyentes tenían que estar sometidos a ese sistema y no todos, por lo que no había una visión de integralidad, y es por ello que primero “se debe adaptar a la integralidad de los actores”.

Consideró que los niveles de tecnología, así como el internet en el país, no son de los mejores, por lo que hubiera provocado serias dificultades a los contribuyentes.

Además, sostiene que las entidades públicas tienen que tomar en cuenta la universalidad, que señala la Constitución Política del Estado (CPE), es decir que debe elaborarse una normativa para que se sometan todos, y no parcializarse.

Señaló que hay algunos emprendimientos económicos que no cuentan con las herramientas necesarias para implementar la facturación electrónica, y a esto se suma la velocidad variable del servicio de internet que presta cada operador, por lo que la puesta en marcha del mismo hubiera provocado dificultades a los contribuyentes.

Criticó a la ex administración del SIN, que elaboró normativas para el sector hotelero y constructor, especiales y especifica. “Dónde se ha visto que una norma salga del margen de la universalidad, dónde se ha visto controlar a uno más y a otros no. Acaso el comportamiento no es el mismo de los contribuyentes”, reflexionó.

Es por ello que señaló, que con la implementación de la facturación electrónica hubiera habido más presión para aquellos contribuyentes que se esfuerzan, pero para los malos, no.

Ahora aboga por el consenso para implementar la facturación electrónica en el futuro, cuyo principio se perdió en los últimos años, siempre en diálogo con los actores.

“El país ha perdido el principio fundamental de las buenas prácticas de las normas, en consenso. Hace más de 16 o 20 años, toda normativa buscaba un acuerdo conjunto, y se dialogaba con todos los actores”, recordó.

Reconoce que el Gobierno está en su derecho de implementar modelos, dirigir conductas, pero para que sean eficientes, se necesita que todos deban dar sus criterios para esa normativa.

En este último tiempo, no hubo eso.

Por su parte, el gerente General de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Gustavo Jáuregui, calificó calificó como “acertada” la decisión del Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) de dejar sin efecto la aplicación del Sistema de Facturación Electrónica (SFE), que debía comenzar el 1 de junio, debido a que permitirá a las empresas seguir trabajando con el Sistema de Facturación Virtual y evitará hacer gastos adicionales para su puesta en marcha.

Jáuregui recordó que la Cámara Nacional de Comercio lideró, desde el año pasado, las gestiones ante el SIN para postergar la aplicación de la factura electrónica y efectuar un mejor análisis de la realidad comercial y tecnológica para su ejecución.

En ese entendido, explicó que el gremio considera que se debe replantear el Sistema de Facturación Electrónica debido a las dificultades registradas, hasta ahora, para su puesta en marcha y porque hay un número reducido de empresas certificadas.

El ejecutivo apuntó –además- que el país requiere de una red de comunicación por internet, que sea estable y fiable, y posibilite consolidar la facturación electrónica y el reporte a la administración impositiva en tiempo real, como pretendía el Sistema de Facturación Electrónica.

Agregó que a ello se suma que se debe considerar las consecuencias económicas a raíz de la emergencia sanitaria por el Covid-19, que imposibilitan ahora a las empresas desembolsar recursos adicionales para aplicar herramientas tecnológicas y de comunicaciones, que deben garantizarse para su ejecución.

En ese sentido, Jáuregui espera que las autoridades del SIN convoquen a las organizaciones empresariales para diseñar las modalidades de facturación electrónica que estén acordes con la realidad tecnológica, operativa y comercial de las empresas del país.

FACTURACIÓN EN LÍNEA Y OTRAS

La RND N° 102000000011 también establece que es necesario continuar con la implementación de las modalidades de Facturación Electrónica en Línea, Computarizada en Línea y Portal Web en Línea, de acuerdo con la realidad económica e inversión realizados para el desarrollo de sistemas Propios y/o Proveedores.

Por lo tanto, estas modalidades se reglamentarán de forma separada del Sistema de Facturación Virtual, en el marco de una política de modernización, administración eficaz y eficiente del régimen de impuestos, en base a criterios de integridad, sencillez administrativa, seguridad y equidad jurídica, señala la nota del SIN.