María de los Ángeles Reyes
Desde el inicio de la cuarenta, una de las actividades ineludibles es la compra de alimentos, ya sea en el mercado o el supermercado. Y como sólo se cuenta con un día para hacerlo se hace indispensable el saber cómo conservarlos para que nos duren más tiempo. Para ello conversamos con la chef Anahí Reyes.
“El método más utilizado para conservar los alimentos es el refrigerador. Una de las mejores formas de evitar que se dañen las verduras y las frutas, pues el frío contribuye a reducir la velocidad a la que actúan las bacterias y demás elementos que degradan los alimentos”, explica Reyes.
La chef afirma que en el refrigerador se pueden guardar casi todas las verduras con excepción de la cebolla y los tubérculos (papa, yuca, camote, oca y betarraga), que es mejor conservarlos en un lugar seco y fresco. En el caso de la papa ponerla en un costal y puede estar tranquilamente un año sin mayor problema.
Cómo ordenar la verdura
El refrigerador tiene varios niveles uno que es el congelador, que por lo general es utilizado para guardar las carnes, luego está la parte media donde están los estantes en los que se acomoda algunos vegetales y en la parte baja que corresponde al cajón de verduras.
“Comprada la carne de res o de pollo se debe proceder a cortarla en porciones que serán utilizadas en la semana, se la pone en tápers de vidrio o de plástico y si no se cuenta con ellos, se puede optar por bolsas de plástico gruesas para congelar estos alimentos. De esta manera un día antes de utilizar la porción se la baja a los estantes para que la cadena de frío no se rompa bruscamente”, asegura Reyes.
Por otro lado en el caso de los vegetales de hojas verdes como la lechuga, acelga, apio y perejil, entre otros, se los puede conservar envueltos en papel de cocina o bien en un táper con un papel de servilleta encima para que absorba la humedad y evitar que las hojas se tornen amarillas y pierdan por tanto sus propiedades.
“Antes de acomodar la verdura en el cajón correspondiente, se debe poner en la base papel de cocina con el propósito de que éste absorba la humedad que se produzca y recién comenzar a acomodar la zanahoria, el nabo, las habas y las arvejas, entre otros productos para que se conserven en mejor estado y por más tiempo”, explica la Chef.
En el caso del brócoli, la coliflor y el zapallo se acomodan en la parte baja del refrigerador cubiertos con un papel de cocina o servilletero que contribuya a reducir la humedad que se tenga. Salvo el tomate y el locoto que debe estar en un táper con un papel servilletero encima, esto con el propósito de conservarlos en mejor estado.
Recomendaciones
La chef sugiere hacer una compra racional de productos pensando en lo que se va a cocinar en la semana y no adquirir alimentos que no se van a consumir y, por consiguiente, van a generar desperdicios. Para ello es importante tomar en cuenta la cantidad de miembros en la familia con el fin de ahorrar y gastar solo en lo necesario.
1.- Las carnes no congeladas se pueden guardar 2 días y como máximo 3 en el refrigerador.
2.- La carne de pollo cuando no se congela dura como máximo 2 días en el refrigerador.
3.- Las verduras se las lava y se las deja secar antes de acomodarlas en el refrigerador.
4.- Las verduras no deben guardarse en bolsas cerradas porque se descomponen.
5.- Se debe cortar las hojas de la zanahoria, la betarraga o el nabo, pues éstas se descomponen con facilidad.
5.- Las bolsas utilizadas para el envase de hielo, fideos o azúcar que son gruesas, son ideales para guardar carne y ocupan menos espacio en la congeladora.