Ronald Ribera Molina fue sentenciado a 25 años de privación de libertad acusado de violación a infante, niña, niño o adolescente con agravante, cometido contra una adolescente de 13 años, en el municipio de Portachuelo, informó el fiscal departamental de Santa Cruz, Roger Mariaca.
“En audiencia cautelar el sujeto admitió haber cometido el delito y, de manera voluntaria, decidió renunciar al juicio oral y solicitó acogerse a la salida alternativa del procedimiento abreviado. Además, la Fiscalía presentó las pruebas que demuestran la responsabilidad de Ronald Ribera de 22 años de edad, como el informe de entrevista psicología y social de la menor y el certificado médico forense”, aclaró el fiscal del caso, Ricardo Cayola.
De acuerdo a las investigaciones, el ahora sentenciado trabajaba en la casa de la víctima, en el municipio de Portachuelo, desde que él tenía
11 años de edad y se ganó la plena confianza de la familia.
En diciembre del 2018 la madre de la menor viajó con otra de sus hijas hasta la ciudad de Santa Cruz dejando sola a la víctima que en ese momento tenía 10 años, situación que fue aprovechada por Ronald Ribera quien la sedujo y le pidió iniciar una relación sentimental para posteriormente mantener relaciones sexuales. El hecho delictivo fue cometido en reiteradas ocasiones.
El 14 de julio del presente, la madre de la menor, quién ahora tiene
13 años, presentó la denuncia en dependencias policiales del municipio de Portachuelo indicando que su hija fue víctima de violación por parte de su empleado y producto del vejamen tenía 31 semanas de gestación.