El colmo de la ignorancia masista fue desconocer la gravedad del Covid-19

Como es de conocimiento general, la pandemia del Covid-19 se presentó en nuestro país en marzo de 2020, y obligó al Poder Ejecutivo, presidido por la Dra. Jeanine Áñez Chávez, a declarar la cuarentena, esto es, que los habitantes del país no deben salir de sus casas --salvo excepciones--, para no contagiarse con el virus de la muerte, por el tiempo que señalen las autoridades del Ministerio de Salud Pública, y que será de acuerdo con la cantidad de casos que se presenten en ciudades y poblaciones de Bolivia.

Declaración de cuarentena que fue desvirtuada por los parlamentarios masistas que manifestaron públicamente que el coronavirus era un invento de la que públicamente denominan ilegal presidenta de Bolivia, Dra. Jeanine Áñez Chávez, “por su pretensión de prorrogarse en el Poder gubernamental” de nuestro país.

Declaración de cuarentena que oportunamente hizo la Presidente Constitucional, y es más, aclaró desde un principio que la única manera de hacer frente al mortal virus, en las actuales condiciones económicas heredadas del anterior gobierno, era solicitar préstamos económicos a organismos internacionales, para poder cubrir los gastos que demande la compra de equipos de alta tecnología médica, así como de medicamentos imprescindibles.

Y sucedió lo impensable, organismos internacionales ofrecieron préstamos a países ricos y pobres del mundo para hacer frente a la pandemia del Covid-19. Ofrecimiento que les cayó como un balde de agua fría a todos los terroristas parlamentarios masistas, que rechazaron de plano dichos préstamos y advirtieron a la Presidenta Constitucional que quedaban congelados esos pedidos, porque el parlamento masista “no permitirá que se endeude a nuestro país”, sin antes saber cómo piensan pagarlos.

Los parlamentarios masistas aprovechando ciertos programas de “micrófono abierto”, tanto en radioemisoras como en canales de televisión del país, han declarado públicamente que ellos no se oponen a dichos endeudamientos, pero lo que ellos quieren es una explicación clara y sencilla, que les digan en qué se va a gastar, cuánto va a costar, y cómo se va a pagar.

Y que ellos, como parlamentarios que ahora actúan en estricto cumplimiento de lo que manda nuestra Constitución Política del Estado, tienen el deber de precautelar los intereses económicos de Bolivia.

Y el ciudadano común pregunta a estos supuestos defensores qué han hecho durante los catorce años en los que solamente levantaban la mano izquierda hacia arriba y decían y repetían como loros o disco rayado ¡aprobado, hermanos!, ¡aprobado! Así aprobaron préstamos billonarios de la China, así como una serie de actos delictivos, que están tipificados como “Traición a la Patria”, de los cuales son cómplices, autores intelectuales y materiales, y como tales tendrán que seguir los mismos pasos cuando la justicia boliviana sentencie al corrupto, terrorista y genocida Evo Morales Ayma, esto es, a 30 años de reclusión carcelaria sin derecho a indulto. Había que recordarles que los delitos económicos no prescriben, a fin de que se vayan preparando para lo que les espera, ¿verdad que sí?