La vuelta a los entrenamientos de la plantilla del Barcelona, tras el día de fiesta que concedió Quique Setién a sus jugadores, deja la imagen de Leo Messi participando con normalidad en la sesión preparatoria aunque luciendo, como medida de precaución, un llamativo vendaje tras el durísimo golpe de recibió en el partido de octavos contra el Nápoles. La otra imagen, y también muy esperanzadora, es la de Dembélé participando en la 'pachanga'. El francés cada vez está más de cerca de formar parte de la expedición blaugrana a Portugal, donde el Barça se jugará su última bala deportiva: la Champions League.