La comisión francesa que buscó la longitud del mundo en el Siglo XVIII

En 1735, la Academia Francesa de Ciencias de París, con el objeto de saber si el globo terráqueo estaba achatado en los Polos, envió una comisión científica a la Real Audiencia de Quito (hoy Ecuador), para que midiera la longitud del arco meridiano y otra a Laponia (Finlandia), para efectuar una acción análoga.

La primera citada expedición estuvo integrada por Louis Godín, Pedro Bouguer y Charles-Marie de La Condamine junto a los adjuntos: Alfredo Lacroix, el botánico Joseph de Jussieu, el cirujano Jean Seniergues, el relojero Hugot; los ingenieros Verguín y Morainville, junto a los ayudantes Couplet y Godín Des Odonnais. También participaron los oficiales españoles Antonio de Ulloa y Jorge Juan y Santacilla.

De esta manera, la citada delegación científica partió a bordo de la embarcación ‘San Cristóbal’ del puerto La Rochele, el 16 de mayo de 1735 y arribaron al Puerto de Manta, el 10 de marzo de 1736. Fue en este puerto que Bouguer y La Condamine iniciaron sus investigaciones y en Manabí determinaron el paso de la ‘Línea Equinoccoail o Ecuador’.

Posteriormente, aunque tropezaron con graves dificultades al ser considerados contrabandistas o espías a un inicio, los académicos franceses trabajaron de forma admirable hasta deducir los cálculos geodésicos de la longitud del arco de Meridiano, en el Ecuador, de 56.775 toesas al nivel de Caraburo y de 56.750 toesas a nivel del mar.

Es necesario destacar, que La Condamine envió en junio de 1736 muestras de goma elástica a la Academia y muchos años después, en 1851 publicó la primera nota científica sobre esta materia. Por otro lado, es necesario destacar que el citado naturalista francés exploró el curso principal del Amazonas en 1743 y producto de la misma publicó la célebre obra: ‘Relation abrégée d'un voyage fait dans l'intérieur de l'Amérique méridionale. Depuis la côte de la mer du Sud, jusqu'aux côtes du Brésil & de la Guiane, en descendant la riviere des Amazones, lûe à l'assemblée publique de l'Académie des science’. Regresó a París el 24 de febrero de 1745 y tres meses después lo hizo su compañero Bouguer.

Por desgracia los exploradores Couplet, Morainville y Seniergues, fallecieron en el transcurso de la expedición y Hugot y Juan Godín Des Odonnais contrajeron matrimonio con damas ecuatorianas. Por otro lado, Louis Godín y José de Jussieu se trasladaron a Lima y salieron juntos hacia Buenos Aires. Cuando se encontraban en el Lago Titicaca, Jussieu recolectó ejemplares de avifauna que fueron enviados al famoso Jardín du Roi.

Posteriormente, en La Paz los exploradores se separaron. Godin continúo su viaje a hacia Buenos Aires y Jussieu, “descendió hacia la región de los Yungas para estudiar el cultivo de la coca y posteriormente volvió a subir la cordillera, pasó por Oruro, visitó Chuquisaca y Santa Cruz de la Sierra, llegando a Potosí en julio de 1750”, apuntaron los investigadores Francisco Pelayo y Miguel Ángel Puig-Samper.

En esta última citada ciudad permaneció cuatro años, trabajando como médico y estudiando algunos principios de ingeniería. Por otro lado, también ensayó diferentes procesos de amalgamación de la plata y con los años elaboró una descripción de la hoja de coca. Retornó a Francia en 1771.

Por último, los trabajos realizados por la citada comisión francesa mejoraron de manera considerable la cartografía de América del Sur y resultaron un éxito para la metrología francesa de la época.