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Desorden total
> En varias zonas donde existe poco control se formaron ferias improvisadas que ponen en peligro la salud de los habitantes y aumentan los eventuales contagios con el virus
Dirigentes de los gremiales de El Alto exigen al municipio que la proliferación de asentamientos ilegales, a causa de la pandemia del Covid-19, pueda ser normada. Las calles, avenidas, aceras y calzadas están ocupadas y representan riesgo para la población.
La falta de un control adecuado por parte del municipio, mediante la Intendencia, dio lugar a que de un tiempo a esta parte este problema en el momento haya llegado a un desorden y en otros comerciantes la falta de la regularización de las ordenanzas.
“Nosotros entendemos la necesidad de estas personas, del porqué están en las calles, pero también debemos cumplir con las ordenanzas, donde existen algunas prohibiciones de asentamiento en algunos sectores que no están permitidos, pero además están prohibidas la presencia de nuevos asentamientos y en ese marco pedimos a las autoridades municipales que hagan cumplir las normas”, señaló el dirigente del sector Rodolfo Mancilla.
El representante del sector dijo que deberá ser la dirección de ferias y mercados la que haga cumplir con estas normativas o que finalmente puedan retirar estos puestos callejeros que han proliferado en todas zonas alteñas, provocando un desorden que pone en peligro la salud de los alteños a causa de la pandemia que se vive como es el coronavirus.
Al momento, todas estas personas que tienen sus puestos con carácter de ambulantes, ninguno tiene su legalidad como aquellas organizaciones que tienen la ordenanza municipal por lo que están incumpliendo las normas.
“Estas actividades que no tienen ningún control han proliferado y lo que más preocupa es que aparecen en barrios donde nunca hubo este tipo de comercios, puestos ambulantes en el sector de la Ceja, Puente distribuidor, pasarela del Arquitecto y otros que no están permitidos ni ambulantes, menos puestos fijos”, dijo el dirigente.
Los vecinos de estos lugares denunciaron que estas personas que ambulan en diferentes puestos, muchos de ellos incumplen las normas de bioseguridad, donde se les puede ver sin barbijos y hasta aglomerados lo que significa el riesgo de un contagio masivo.
Otro de los problemas que se puede ver a diario, según las denuncias de los propios habitantes de estos sectores, es que los controles de la intendencia desaparecieron, lo que ha dado lugar a que la aparición de estos puestos continúan aumentando en la Ceja y calles adyacentes, sin que exista autoridad que pueda controlar esta actitud del comercio informal.
