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La Federación Boliviana de Automovilismo Deportivo (Febad) recibió la aprobación de la Sociedad Boliviana de Medicina del Deporte en el protocolo de bioseguridad por Covid-19 para la realización del Campeonato Nacional y sólo espera el visto bueno de las autoridades del Ministerio de Salud y del Viceministerio de Deportes.
"Una vez que tengamos la aprobación del Ministerio dentro de 15 días estaríamos listos para correr", declaró Yamil Segovia, director de la Comisión Deportiva de la Febad, tras la llegada de la aprobación de parte de la Sociedad de Medicina del Deporte el fin de semana.
De esta manera, la Febad es la segunda federación deportiva nacional que ha recibido el aval en este primer proceso de trámite para regresar a la actividad; la primera fue la Federación Boliviana de Fútbol (FBF).
La documentación requerida fue sometida a evaluaciones y correcciones desde el 24 de julio. El protocolo cubre las competencias en la modalidad de rally y pista a nivel nacional, involucrando la infraestructura deportiva: los parques cerrados.
En estos parques, la dirigencia federativa aplicará un control de bioseguridad con énfasis en el uso de alcohol de gel, utilización de mascarilla, distanciamiento físico y antes de cada prueba los pilotos serán sometidos a un test Covid-19.
La Febad quiere volver a la ruta con la tradicional carrera Oscar Crespo por tratarse de una prueba emblema en esta disciplina y que en este año celebrará los 50 años. La dirigencia confía en que este evento deportivo pueda llevarse adelante en octubre y contar con el tiempo suficiente para celebrar una o dos pruebas más. Con la conformidad del Gobierno, habrá un congreso en el cual se tomarán decisiones sobre el calendario.
La dirigencia federativa está abierta a que alguna de las siete asociaciones departamentales reanude sus competencias, una vez que se cuente con la aprobación gubernamental, cumpliendo con las medidas de seguridad y con la presencia de delegados médico y del directorio para un mayor control.
Los pilotos, mecánicos y dirigentes mantienen su ofrecimiento como voluntarios para someterse a la vacuna que está desarrollando la Universidad de Oxford del Reino Unido. El pedido fue efectuado a finales de julio, a través de una carta dirigida al Ministerio de Relaciones Exteriores.
