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Hoy recordamos a la voz símbolo de la Red Uno, que no solo identificó a esta red televisiva, sino también a El Mañanero, desde donde irradiaba alegría y fuerza a los televidentes y conductores del programa como voz en off.
Jesús Rodríguez falleció el pasado jueves, víctima del Covid-19, y su partida consternó al mundo de la comunicación boliviana.
Su voz no solo identificó a la Red Uno de Bolivia, como locutor oficial de sus avances y promociones -tal como recordó el comunicador Ramiro Serrano- sino también a El Mañanero. Jesús fue durante más de una década y media “voz en off” del matinal de la Red Naranja, desde donde irradiaba alegría y fuerza a los televidentes y conductores del programa.
El comunicador compartía su profesionalismo con información y buen conocimiento del quehacer musical. Era, sin duda, el complemento ideal de los conductores.
A manera de rendirle un sentido homenaje póstumo al también DJ y locutor de Stereo 97, hoy extractamos algunos fragmentos de la entrevista que el entonces suplemento Tu Guía del periódico EL DIARIO le hizo a Jesús acerca de su trabajo en El Mañanero de la Red Uno, estación televisiva donde dejó una notable huella.
“Yo creo que lo más importante es la versatilidad de las personas… Acá, en la Red Uno, no hay camarillas, el corazón y la casa son grandes”, afirmaba este comunicador de voz única y gran corazón.
TG: ¿Qué hace diferente a El Mañanero?
J: Algo importante es la calidad humana, el ambiente que compartimos y esos detalles que hacen que el grupo de amigos haya crecido no solamente dentro del canal sino afuera. Nuestra amistad va más allá de estas cuatro paredes, compartimos alegrías y penas, hemos solidificado un grupo de amigos que se refleja en pantallas y por eso el equipo se lleva tan bien.
La fórmula de El Mañanero es única, damos las noticias tal cual son, frescas en la mañana.
