Tras bajar durante cuarentena rígida
> El humo causa varios problemas de salud, especialmente en esta época en la que amenaza el coronavirus, según expertos
A consecuencia de los chaqueos e incendios forestales en zonas cercanas a La Paz y en otros departamentos del país, la urbe se encuentra contaminada por el humo que permanece sobre la ciudad, el fenómeno se puede ver mejor desde las alturas y se hace más evidente con un color amarillento a la vista lejana del paisaje y la casi desaparición del Illimani bajo la densa humareda que invade el cielo.
Los expertos afirman que estas prácticas de quemas en zonas rurales, aparte de contaminar, son perjudiciales para la salud de los habitantes, especialmente por la amenaza del coronavirus que afecta mayormente a personas con enfermedades de base.
Según ANF, del total de focos de calor registrados, 10.265 se concentran en 48 territorios indígenas y en 60 áreas protegidas de Santa Cruz, Beni, La Paz, Pando y Cochabamba.
De igual forma, en agosto, los focos de calor se duplicaron a comparación de lo que sucedía en julio (21.705 focos). El mayor incremento se registra en los departamentos de Beni, Santa Cruz, La Paz, Cochabamba y Pando.
Lo contrario ocurrió en abril de este año, cuando la contaminación del aire bajó notablemente cuando la pandemia viral azotaba con rigor a varias ciudades de Bolivia. La responsable de Servicios Ambientales de la Alcaldía de La Paz, Nadiezdha Godoy, informó en esa ocasión que se redujo en el 60 % la contaminación ambiental en la ciudad, durante la cuarentena, que se determinó para evitar la propagación del coronavirus Covid-19.
“Hemos podido ver que si existe una disminución del 60 %, según nuestros datos del monitoreo que realizamos”, informó la funcionaria.
Explicó que la Red de Monitoreo de la Calidad del Aire (MoniCA), de la Alcaldía de La Paz, realizó una evaluación a finales de 2019, cuando se registró entre 45 y 80 microgramos de agentes contaminantes por metro cúbico.
Sin embargo, Godoy indicó que desde que se aplicó la cuarentena, la contaminación del aire fue disminuyendo de manera considerable llegando a los 12 microgramos por metro cúbico, lo que significa una reducción del 60 %, reportó ABI.
La funcionaria aseguró que esta baja en la contaminación se debe a que se redujo la circulación del parque automotor, considerando que el transporte vehicular es uno de los agentes que más contamina el medioambiente paceño.
Sobre el mismo tema, diferentes estudios y artículos científicos encontraron correlación entre la calidad de aire y su incidencia sobre enfermedades víricas, como la del coronavirus, y señala que la población que vive en zonas con altos niveles de contaminación tendrían más probabilidades de sufrir peores efectos del Covid-19.
El Centro de Investigación sobre Energía y Aire Limpio (Center for Research of Energy and Clear Air, CREA), una organización de investigación independiente centrada en revelar las tendencias, causas e impactos de la contaminación en la salud, recopiló una serie de investigaciones sobre la calidad del aire y el coronavirus.
“Los altos niveles de contaminación del aire afectan las defensas naturales del cuerpo contra los virus en el aire, haciendo que las personas sean más propensas a contraer enfermedades virales”, explica Crea.
La organización indica que “la contaminación del aire aumenta el riesgo de muchas condiciones preexistentes (como diabetes, enfermedades pulmonares, asma, enfermedades cardiacas y otros) y que hacen que el Covid-19 sea más grave y mortal”.
El biólogo boliviano Huáscar Bustillos coincide y señala que “ya existe evidencia científica en relación a un vínculo entre la calidad del aire y la infección por SARS CoV-2 y es que la contaminación atmosférica puede ser ya considerada como un factor que influye directamente en los niveles de mortalidad por SARS CoV-2”.
El año pasado en Bolivia, el gigante incendio en la Chiquitania marcó por semanas al país, la pérdida de fauna y flora fue enorme, sin embargo aunque aún no se tiene estudios sobre el grado de afectación, reseñó Los Tiempos.
“Se tiene un cálculo aproximado que en el mes de agosto del 2019 se emitieron unos 25 megatoneladas de CO2 a la atmosfera, lo que ha provocado periodos de polución extrema tanto en las ciudades como las provincias”, afirmó Bustillos.