Rusia autoriza la compra de carne bovina de Bolivia y con la opción de venta de producto a países miembros de la Unión Euroasiática, Armenia, Belarus, Kazajstán y Kirguistán, informó la ministra de Desarrollo Rural y Tierras, Eliane Capobianco, en conferencia de prensa realizada en la ciudad de Trinidad, Beni.
Vladimir Sprinchan, embajador de la Federación de Rusia en Bolivia, manifestó que ese acuerdo es un nuevo paso en la cooperación económica bilateral.
“Hoy se inicia un proceso muy importante de acercamiento entre nuestros países. (…). Cuando todo el mundo se confronta con la pandemia del Coronavirus, los países tiene que unirse para ganarle a esta enfermedad”, expresó Sprinchan.
Capobianco dio a conocer que se habilitó la carne bovina boliviana y el registro de frigoríficos para que los mismos puedan exportar a Rusia y otros países de la Unión Económica Euroasiática. Especificó que fueron habilitados los frigoríficos Frigor S.A, Fridosa S.A. y BFC S.A.
“En momentos tan duros de pandemia, momentos económicos difíciles en todo el mundo, nuestro país se va a ver beneficiado con la apertura de estos nuevos mercados”, sostuvo la autoridad.
El presidente de la Confederación de Ganaderos de Bolivia (Congabol), Juan Carlos Abularach, indicó que para el sector, es un día histórico para el sector pecuario del país. Agradeció el trabajo que realizó el gobierno, proyectando al país hacía una nueva perspectiva económica.
Previamente a este resultado, una misión técnica de seis expertos en sanidad animal y de inocuidad alimentaria proveniente del Servicio Federal de Vigilancia Veterinaria y Fitosanitaria de Rusia ROSSELJODZNADZOR, visitaron Bolivia para realizar una auditoria in situ, con el propósito de concretar la habilitación de carne bovina boliviana y el registro de frigoríficos para su exportación.
En esta visita técnica, los especialistas se reunieron con autoridades del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag), para evaluar el sistema oficial de control sanitario de nuestro país, lo cual incluye los aspectos vinculados a la sanidad animal (verificación del estatus sanitario en materia de enfermedades bovinas, supervisión oficial de la producción ganadera) y a la inocuidad de alimentos (supervisión oficial de los mataderos de exportación).
Se evalúo también, la capacidad de los laboratorios oficiales respecto al diagnóstico de enfermedades, residuos de sustancias, y cuestiones microbiológicas.
En los establecimientos frigoríficos nacionales habilitados a la exportación, la delegación rusa verificó su capacidad de producción y de cumplimiento de la normativa boliviana y de los requisitos de Rusia y de la Unión Económica Euroasiática.
Actualmente, Bolivia tiene un saldo exportable de más 20.000 toneladas de carne bovina, que podrían representar ingresos por más de 100 millones de dólares; con tendencia a incrementar. Se espera colocar parte de este excedente en el mercado ruso, que es un gran demandante de carne bovina.