En medio de pandemia
> Gary Antonio Rodríguez Álvarez, gerente general del IBCE, recordó que Estados Unidos (EEUU), con más de doscientos años de existencia desde su fundación en 1776, no solo es uno de los países más extensos del mundo
Estados Unidos se convierte en un mercado de oportunidades para Bolivia, según publicación del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE). El organismo considera que el generar empleos es importante por la exportación al país estadounidense.
En criterio de Gary Antonio Rodríguez Álvarez, gerente general del IBCE, Estados Unidos (EEUU), con más de doscientos años de existencia desde su fundación en 1776, no solo es uno de los países más extensos del mundo, sino que detenta la economía más grande del planeta con un Producto Interno Bruto superior a los 20 billones de dólares (millones de millones).
“EEUU es un país propicio para hacer negocios, por lo que las instituciones financieras y económicas claves del orbe están allí, confirmando su valía mundial”, señaló el IBCE.
La organización indicó que la potencia mundial tiene una economía moderna, diversa, avanzada y abundante en recursos naturales; la Bolsa de Valores más grande del planeta, el mayor depósito de reservas de oro, carbón y otros recursos naturales como cobre, plomo, hierro, mercurio, potasio, plata, zinc y madera están en su geografía, así como 139 de las 500 empresas más grandes en el ámbito internacional.
“Al ser la economía más grande del mundo, su inmenso mercado abre enormes oportunidades de relacionamiento comercial, concretando para ello acuerdos financieros entre países que no solo estimulan la inversión, sino también preferencias arancelarias, para estimular el comercio. Por ejemplo, el Sistema Generalizado de Preferencias (SGP) otorga ventajas para la colocación de la mayoría de productos manufacturados y agrícolas de Bolivia”, apuntó Rodríguez.
IBCE recordó que, en 2019, el 16¨% de las exportaciones del país entraron a EEUU bajo el SGP, cifra estimulante para aprovechar de mejor manera el gran potencial que implica un mercado de más de 300 millones de consumidores, con un PIB per cápita cercano a los 60.000 dólares, el mayor importador mundial, un mercado transparente, previsible y de alto consumo, sin mayores barreras paraarancelarias.
Rodríguez resaltó que el tener relaciones comerciales con EEUU ha significado la posibilidad de generar empleos en el país, no solo al momento de la producción de bienes de exportación, sino en el proceso logístico del comercio exterior, incluyendo la importación; así también, oportunidades para que talentos humanos triunfen de forma cooperativa o a través de franquicias que apostaron como parte de su crecimiento, el establecerse en Bolivia.
El gerente del IBCE, además, argumentó que, no solo el ámbito monetario entra en juego, sino también la cultura corporativa que al combinarse con la cultura local, genera un nuevo ambiente de trabajo el cual permite innovar, aportar al desarrollo del país, promover la inclusión, disponer de nuevas técnicas económicas, sin dejar de lado la responsabilidad social empresarial como parte del camino que lleva a la consolidación exitosa de una empresa.
En el ámbito del intercambio comercial bilateral, si bien las exportaciones bolivianas a EEUU se concentran entre minerales (estaño, plata, formas en bruto de oro, volframio, principalmente), productos agroalimentarios como la quinua, castaña, azúcar de caña, hacen parte de los más de 200 bienes exportados a dicho mercado, muchos con valor agregado, indicó el IPCE.
“En todo caso, siendo EEUU un país de oportunidades, como entidad de promoción del comercio exterior, desde el IBCE abogamos por la negociación de un acuerdo comercial bilateral para beneficio mutuo”, señaló.
De acuerdo con el IBCE, la presente publicación contiene historias que tienen que ver con la relación comercial entre Bolivia y EEUU, con cifras y puntos de vista que inducir a soñar, pero también a trabajar mucho, siendo que la mejora continua es un factor determinante para ser sustentable y competitivo.
IBCE informó que la ocasión es propicia para aplaudir las actividades desarrolladas por tan importante legación diplomática en Bolivia en diferentes áreas, para beneficio de la sociedad boliviana, como la reciente ayuda humanitaria para combatir la pandemia del Covid-19 y otras acciones de ayuda para enfrentar desastres, sin olvidar el constante apoyo con programas de inversión, comercio y fortalecimiento de capacidades y habilidades para coadyuvar al desarrollo de nuestro país.