Ciudadanos critican atentados contra históricos monumentos

Miles de paceños criticaron ayer la actitud de algunos grupos de activistas que actuaron por una supuesta “reivindicación” y dañaron dos estatuas que son patrimonio de la ciudad de La Paz que tienen antigüedad de más de 90 años.

“Nadie está en contra de sus expresiones o protestas, pero que no dañen estos monumentos históricos que pertenecen a todos los paceños”, repudiaron.

Por la mañana, agrupaciones de activistas tomaron predios de la estatua de Cristóbal Colón en El Prado paceño para pintarrajear el lugar, echaron pintura roja y dibujaron alusiones indígenas. En tanto, el monumento en la plaza Isabel La Católica también fue manchada y vestida con indumentaria de la mujer de pollera. En ambos lugares pregonaban la reivindicación del 12 de octubre como Día de la Descolonización. Sin embargo, deslindaron responsabilidad por el daño al ornato público ocasionado con evidencia.

“Luego de la evaluación van a comenzar a la brevedad posible los trabajos de limpieza, fundamentalmente para eliminar las evidencias de agresión que han sufrido ambos bienes del ornato público. Ese trabajo lo vamos a encarar con las técnicas que correspondan a fin de no dañar el material constitutivo de ambos, que es de mármol”, explicó la directora de Patrimonio Cultural, Ximena Pacheco.

Por sus características históricas, ambas esculturas son consideradas un patrimonio de la ciudad, al margen de una declaratoria formal. Al haber sido dañadas y al ser parte del ornato público, los autores de la agresión serán sancionados, advirtió la funcionaria edil.

“Se va a recopilar la información que se registró en las cámaras (de video vigilancia) de las áreas próximas de esos dos espacios. Y emergente de esta información se coordinará con la Dirección Jurídica para definir los procedimientos que pudieran encaminar a una sanción por estos daños”, agregó.

Pacheco recordó que ambas figuras fueron donadas por los residentes de España e Italia, en agradecimiento por la acogida en La Paz. En ambos casos, fueron erigidos con autorización municipal mediante ordenanzas aprobadas en 1926. El monumento de Isabel La Católica fue entregado en 1924, tiene una altura de dos metros y un peso de casi una tonelada. En tanto, la estatua de Colón fue donada en 1926, tiene una altura de dos metros y un peso de una tonelada. Es una obra del escultor italiano Giuseppe Graciosa.