El delantero Wayne Rooney se mostró ayer "triste y enojado" por tener que perderse varios partidos con el Derby County en la Championship (2ª división inglesa) a causa de la cuarentena que debe guardar como caso contacto estrecho, a pesar de su test negativo en coronavirus.
"Acabo de recibir los resultados de mi test y no tengo el virus. Encantado por mí y por mi familia, pero evidentemente enojado y triste por tener que ponerme en aislamiento y perderme partidos cruciales con el Derby", declaró la antigua gloria del Manchester United y excapitán de la selección inglesa.
Rooney se unió al equipo de Derby a comienzos de 2020 con un doble rol: a la vez que jugador ocupa un puesto en el cuerpo técnico del holandés Phillip Cocu.
Según el periódico The Sun, el jugador de 34 años recibió la visita de un amigo en su casa el jueves. Dicho amigo dio más tarde positivo por covid-19.
Aún sin ser consciente de ser caso contacto estrecho, Ronney jugó un día después de la visita de su amigo, el viernes, en la derrota del Derby ante el Watford (1-0).