Como ya sabrás Apple decidió no incluir más los cargadores y auriculares con cable en las cajas de sus celulares. Esto ha generado opiniones encontradas. Por ejemplo en España FACUA pide que se cambie la normativa para evitar que las empresas "vender productos tecnológicos sin todos sus componentes necesarios". FACUA-Consumidores en Acción es una organización no gubernamental, española, sin ánimo de lucro, dedicada desde sus orígenes, en 1981, a la defensa de los derechos de los consumidores.
Hace un par de semanas Apple anunció que sus celulares ya no incluirán el cargador y los auriculares con cable en las cajas como era costumbre hasta ahora. Es así que ni los nuevos iPhone 12 ni modelos anteriores como los iPhone 11 se venderán con estos accesorios.
La compañía asegura que la medida responde a una política medioambiental más fuerte para reducir la huella de carbono en fabricación y transporte de los productos. Sin embargo, usuarios y organizaciones como FACUA no ven con tan buenos ojos la noticia.
Desde FACUA piden al Ministerio de Consumo que se realicen las "modificaciones normativas necesarias". La organización explica que, al margen de las medidas medioambientales que alega Apple, esta decisión no afecta al precio final del móvil, por lo que "los usuarios que necesiten un cargador van a ver incrementado aún más su precio".
La asociación entiende que el uso de un cargador es indispensable para el buen funcionamiento del dispositivo y que, además de incrementar el gasto de los consumidores, supone un riesgo para estos. Si como sustituto los consumidores usan un cargador que no es compatible o adecuado para ese modelo de smartphone podría estropear el dispositivo, afectando a la garantía, o ser peligroso para el usuario al tratarse de un dispositivo eléctrico.
En Francia, Apple está obligada por ley a incluir los auriculares. La normativa francesa es muy clara y cualquier fabricante de teléfonos móviles debe incluir un kit de manos libres. Con esta ley se quiere proteger a los menores de 14 años del riesgo potencial que suponen las ondas electromagnéticas para el cerebro en fase de desarrollo. No cumplir con esta medida puede suponer una multa de 75.000 euros.