Jorge Alberto Lizárraga Torrico
Al margen de comentar los resultados electorales últimos, lo cierto es que según datos del máximo órgano competente, el Movimiento al Socialismo habría alcanzado un triunfo contundente y una mayoría sólida en el Legislativo, haciendo del Binomio Arce-Choquehuanca una realidad a partir de las próximas semanas.
El triunfo masista, para muchos puede interpretarse de dos maneras , o bien el apego hacia el proceso revolucionario iniciado el 2006 como partido político o instrumento político “el masismo” o bien el encariñamiento hacia su líder y ultimo ex mandatario Evo Morales “el evismo”; sin embargo, hay una corriente que aún no ha sido analizada y que puede claramente diferenciarse de las últimas dos y es la corriente arcesista entendida como aquella calidad o perfil del tecnócrata y mentor entre otros, no solo del modelo económico plural actual sino del plan nacional de desarrollo, esta última pieza fundamental del Estado actual.
Esta corriente arcesista, además de arrimarse a la tecnocracia también se alinea claramente a una política de pensamiento socialista para el bienestar social, no como parte del movimiento hacia, sino claramente del pensamiento político como tal, tal y como muchos se identificaron e identifican aun hoy con Marcelo Quiroga Santa Cruz, con sus grandes diferencias claro.
Ante esta situación y considerando que su acompañante David Choquehuanca es de la línea política del respeto al prójimo a la naturaleza y madre tierra y fiel y leal a las cosmovisiones y principalmente al idealismo del sumaq qamaña, y nada tiene que ver con la forma de hacer política del ala más políticamente agresiva del ex mandatario Morales, hoy sin duda también se constituirá este binomio o bien en la continuidad o la antítesis política de su antecesor , haciéndose gala esta vez de una diferenciación finalmente que un día se hará entre ex altos mandatarios de un mismo proceso pero en diferentes circunstancias que marcara un antes y un después en la historia política de Bolivia.
Arce vs. Evo, Choquehuanca vs García Linera, y frente a las disyuntivas señaladas habrá que sumar el gran desafío de vida personal del primero, encontrándose esta vez no al frente del área económica del país, sino al frente del país en calidad de capitán general y cuyo legado puede constituirse quizá como el mejor de la historia a pesar de la coyuntura actual y donde el respeto, la concertación, la discusión, pero ante todo el pensamiento de patria y unidad en la pluralidad lo caracterice, o bien se auto catapulte como personaje subordinado del masismo o del Evismo .
No debemos olvidar que la vicepresidencia del próximo gobierno tendrá como cabeza al hombre que llevó como bandera del país en el exterior la diplomacia y respeto entre los pueblos y en los pueblos, y que además siempre fue conciliador y autocritico pero ante todo justo y consecuente, frente al intelectual que condujo el Estado de la manera que solo García Linera lo hizo.
Esa forma de la cual nos referimos seguramente será diferente no porque ambos vicepresidentes sean diferentes, lo cual es cierto, sino que la gente que pueda estar detrás de ellos quizá sean diferentes y piensen diferente, esto no quiere decir que unos serán mejores que los otros pero que ciertamente unos tienen una ventaja frente a los otros , cual es “saber y tener vivo” los errores o excesos que quizá se cometieron, lo cual puede conducir a avanzar no solo en lo económico sino principalmente en una maduración política de ahora en adelante.
Independientemente lo anterior, también debemos recordar que quien mantuvo al país con índices de crecimiento económico nunca vistos y valoraciones de órganos internacionales muy positivos a pesar de los períodos de vacas flacas, hoy ya no será el conductor económico sino el presidente de un país, dicho esto con la seguridad de que su lado más característico, el técnico, haga gala de su nuevo y futuro gabinete y claro está de su gestión.
Para nadie es desconocido que de seguro al frente del lado económico y desarrollo plural del país estará sin duda Arce y del lado del relacionamiento internacional y político y unidad país estará Choquehuanca; por tanto, la gran oportunidad de ambos de que su gestión se caracterice mucho mejor que el transitorio y aun mejor que se tuvo con uno anterior, todo está en sus manos.
La tecnocracia y el afianzamiento del modelo económico harán eco de un nuevo gobierno que estará encabezado por un académico que no solo conoce de las necesidades del país y errores políticos del pasado, sino que hoy ya dejo de ser el ex ministro o ex candidato, hoy es el presidente de una Nación.
El binomio actual, no solo tiene una oportunidad política sino un compromiso social que fuera de todos los desafíos y escollos que se presentarán, la capacidad de los gobernantes sumado al trabajo constructivo de los órganos del estado y niveles de gobierno harán de una Bolivia mejor y una Bolivia más transparente.
Finalmente, el beneficio de la duda ante todo, la vida te da segundas o terceras oportunidades que nunca debes desaprovechar, Arce y Choquehuanca se enfrentan a un reto de vida y que si cumplen con su plan de gobierno y trabajan en post de un proceso concertado de políticas de Estado, y el modelo económico no solo se mantiene sino afianza e incluso varia en su concepción y se adapta a nuevos tiempos para hacer frente a las necesidades sociales e institucionales, y en lo político hay muestras de confianza y concertación y cumplimiento de las leyes y la separación de poderes se afianza, no hay duda de que la gestión puede llegar a ser incluso de las mejores de la historia del país, solo el tiempo nos lo dirá.
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