Ante rumores de falsificación
> Sobre la calidad y los materiales de las cédulas de votación, se informó que se privilegió la calidad del producto, además del ahorro de recursos, bajo la política de austeridad en el TSE > El guilloché es una técnica decorativa de grabado en la cual un patrón de diseño repetitivo y complejo es grabado mecánicamente en un material subyacente con gran precisión y detalle
Ante rumores tendenciosos que circulan en redes sociales en relación al carnet de sufragio entregado a los ciudadanos que emitieron su voto en las elecciones generales del pasado 18 de octubre y la posibilidad de su falsificación, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) aclaró que este documento cuenta con varias medidas de seguridad y las condiciones de su impresión como forma de ahorro de recursos económicos.
En los últimos días se han estado difundiendo noticias y contenido falso en sentido de cuestionar la autenticidad y la seguridad de los certificados de sufragio entregados a las personas que emitieron su voto en las elecciones generales del 18 de octubre. Al respecto el Órgano Electoral, mediante su portal web, informó que este documento cuenta con las respectivas medidas de seguridad.
“El certificado de sufragio entregado el 18 de octubre a los ciudadanos que emitieron su voto es un documento que cuenta con varias medidas de seguridad, para evitar su falsificación; además, su impresión significó un ahorro económico importante para el Tribunal Supremo Electoral”, señala parte del comunicado.
Desde el TSE se informó que entre las medidas de seguridad con las que cuenta el certificado se encuentra el patrón Guilloché, con figuras geométricas repetitivas y complejas; tinta invisible, no perceptible a simple vista, solo con luz ultravioleta; código QR, con el número de trámite de registro biométrico del ciudadano; el diseño de fondo es liviano para no perjudicar la visibilidad del contenido del certificado, y no presenta ninguna connotación política.
“Los certificados de sufragio para las Elecciones Generales de este 2020 fueron impresos en Bolivia, en escalas de grises, con lo que el TSE logró un ahorro medio millón de bolivianos respecto al 2019. Esta medida se inscribió en la política de austeridad diseñada por el Órgano Electoral”
Tras el desarrollo de la jornada electoral, sectores políticos radicales cuestionaron la legitimidad de las elecciones que el Movimiento al Socialismo (MAS) ganó con el 55,1 % de los votos, y que consideran que hubo “fraude”.
Estas aclaraciones intentan desvirtuar las denuncias injustificadas y noticias falsas que asocian al carnet de votación como parte de un supuesto fraude en los pasados comicios.
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