Huerto urbano Lak’a Uta
Luego de sufrir un nuevo ataque otro sector que contiene vegetación, en la urbe paceña, las autoridades decidieron tomar acciones en este tema tan recurrente, pero sin ninguna sanción para los autores de incendios, tala de árboles e intenciones de parcelaciones clandestinas en varias zonas de la ciudad.
Reponer los plantines después del incendio en el huerto urbano Lak’a Uta es una de las tres acciones que asumirá la Alcaldía de La Paz para rehabilitar este lugar que fue dañado. La segunda acción está referida a investigar quién provocó la quema del espacio y la tercera acción tiene que ver con cercar el huerto como medida de prevención.
“Luego de la quema intencionada del huerto Lak’a Uta, ya estamos trabajando en la reposición de las especies arbóreas, así como en la sanción de los responsables. He instruido a la Secretaría Municipal de Gestión Ambiental acelerar estas acciones”, escribió el Alcalde de La Paz en sus redes sociales.
Al respecto, el director de áreas protegidas, bosques y arbolado urbano de la Alcaldía, Roberto Rojas, dijo que, al ser una acción provocada, la primera medida será investigar quién quemó el área en coordinación con la Subalcaldía de Cotahuma; segundo, repondrán los 30 plantines en el mismo lugar del área afectada; y tercero, se gestionará cercar la zona para que la gente ya no pueda traspasar al huerto.
En este espacio se realizan capacitaciones en agricultura urbana y, en seis años, 10 mil personas aprendieron sobre producción y seguridad alimentaria.
Rojas recordó que el incendio fue el jueves 29 de octubre por la tarde. “Una persona malintencionada hizo la quema de pajonales, hemos perdido 300 metros cuadrados, específicamente se afectó la plantación que hicimos con la Fundación alternativa el mes anterior, pero no hubo daño a la infraestructura”, afirmó el servidor público.
“Uno de los dos vecinos que se encontraba haciendo el mantenimiento en su parcela pudo resultar herido al intentar apagar el fuego que fue provocado intencionalmente debido a que no existe ningún tipo de material o conexión que pueda originar un incendio de esta naturaleza en el parque municipal y dentro del espacio que ocupa el huerto”, señala parte de un comunicado de La Fundación Alternativas, que apoya este proyecto.
Desde hace seis años, Lak’a Uta transformó 4.000 metros cuadrados de espacio verde en áreas productivas, donde 40 familias cultivan rábano, perejil, coliflor, pepino, nabo, espinaca, zanahoria, entre otras hortalizas.