Cochabamba
El concubino de la mujer de 35 años que fue hallada muerta en su domicilio en el municipio de Entre Ríos a causa de múltiples golpes en su cuerpo y cráneo, fue imputado formalmente por la Fiscalía de Departamental de Cochabamba como principal sospechoso del delito de feminicidio.
Se emitió imputación formal en contra de Álvaro F.E. de 31 años de edad por el delito de feminicidio, que se presume habría cometido en contra de su concubina Martha A.R. de 35 años, quien murió a consecuencia de múltiples golpes en la cabeza en su vivienda, ubicada en el municipio de Entre Ríos.
De acuerdo con el resultado de la autopsia realizada por el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), revela que la mujer murió por hemorragia cerebral, traumatismo cráneo encefálico cerrado y politraumatismo, también presentaba varias contusiones y excoriaciones en todo el cuerpo.
“Se ha tomado la declaración del imputado que mencionó que él no agredió a su concubina y que más bien ella estaba molesta con él porque la noche anterior no se encontraba en su domicilio. También refirió que la mujer primero lo golpeó con un sartén y luego ella se golpeó con unos ladrillos, cayó y se golpeó la cabeza en la esquina de la cama y perdió la vida. Este hecho se encuentra en investigación y preliminarmente se desarrollan varias pericias para llegar a la verdad material del hecho”, informó la fiscal de Material, Marisol Rodríguez.
Según los antecedentes del hecho, el 12 de noviembre en el Sindicato Independencia del municipio de Entre Ríos, la Policía realizó el levantamiento legal del cadáver de una mujer identificada como Martha A.R. de 35 años, que presentaba varias lesiones en el cuerpo, quien fue encontrada en la cama de su domicilio. En este caso, el concubino Álvaro F.E. de 31 años fue aprehendido como presunto responsable del Feminicidio.
El informe policial da cuenta que el concubino fue quien alertó a los vecinos de la situación de su pareja, a quienes les dijo que ella se golpeó, además que desafortunadamente se cayó y su cabeza llegó a la esquina de la cama.
