En el 2019, Bolivia importó calzados de 58 países, de los que destacó Brasil con una participación del 48%, seguido de China con el 31% y Vietnam con el 9%, de acuerdo con cifras del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
Las cifras señalan que en el 2019 la compra de calzados, de diferentes países del mundo, alcanzaron a 91 millones de dólares con un volumen de 9.278 toneladas, y según datos preliminares, en lo que va del 2020 el valor está en 43 millones y 6.028 toneladas.
En el 2019, las importaciones de calzados registraron una disminución del 32% en valor y 55% en volumen frente a los experimentado en el 2015, año donde se registró el pico máximo de las compras externas de estos productos.
Entre enero y octubre del 2020 las importaciones de calzados sumaron 43 millones de dólares empero un 41% menor a lo registrado en el mismo periodo el 2019, por su parte el volumen superó las 6 mil toneladas. Pero tampoco hay que olvidar de que la importación de calzados no sólo se lo realiza de manera legal, sino también ilegal vía contrabando, y no hay que olvidar la mercadería de segunda mano, que también ingresa a país en grandes cantidades.
Las ferias provinciales, así como en algunas zonas de la ciudad de El Alto, ofrecen una variedad de calzados a medio uso de origen americano, pero que tiene en su etiqueta made in China, a precios dos veces menor a los nuevos y originales.
Pero también hay una gran oferta nacional, qué dependiendo de la calidad, hay para todos los gustos y con diferentes precios, pero lo que más encarece a la producción nacional es la importación de materia prima, ya que el mercado internacional sube los precios de acuerdo a la temporada.