Tips tecnológicos
El telescopio espacial James Webb (JWST), una misión internacional de las agencias espaciales de Estados Unidos (NASA), Europa (ESA) y Canadá (CSA), lleva varios años en construcción con un costo de miles de millones de dólares.
Sus responsables planean lanzarlo a millones de kilómetros de la Tierra y los científicos afirman que tendrá la capacidad de detectar cualquier galaxia en el universo.
Una pieza clave del JWST es un instrumento creado por un equipo de astrónomos e ingenieros de Edimburgo, Escocia. Es el MIRI (Mid Infrared Instrument), una herramienta diseñada para medir el rango de longitud de onda del infrarrojo medio.
El MIRI, uno de los cuatro detectores clave del JWST, permitirá mirar hacia el pasado, a unos cientos de millones de años después del Big Bang, un momento que se cree ocurrió hace más de 13.500 millones de años.
La capacidad para mirar el pasado está basada en el hecho de que incluso la luz tiene un límite de velocidad.
Así, debido al tiempo que tarda en recorrer el espacio, cuanto más lejos está un objeto más atrás vemos en el tiempo.
Por ejemplo, como la luz del Sol tarda ocho minutos en llegar a la Tierra, en realidad los que estamos en la Tierra vemos al Sol como era hace ocho minutos.
Entonces, la imagen de una estrella que está a mil millones de años luz distancia tarda mil millones de años en llegar a nosotros.
Y cuando vemos esa estrella, lo que estamos viendo es cómo era hace mil millones de años.
El telescopio James Webb es el instrumento perfecto para estudiar esos mundos y planetas distantes que orbitan otros soles.
La misión está programada para 2021 y está planeado que dure menos de seis años.