Por anuncios de huelga
Ante las medidas de presión anunciadas por el sector salud, exigiendo al Gobierno detener el tratamiento de la Ley de Emergencia Sanitaria por considerarla atentatoria contra su gremio, el arzobispo de la ciudad de Santa Cruz, monseñor Sergio Gualberti, pidió a los médicos buscar otras alternativas al paro indefinido, por considerar que esta medida pone en riesgo la vida de las personas que sufren a causa de la pandemia y que, además, podría provocar muchas muertes en la población.
Gualberti exhortó a los sectores movilizados a deponer actitudes radicales que podrían poner en peligro la vida de los bolivianos que se encuentran en los centros médicos y requieren de tratamiento especial a causa de cuadros complicados con el virus Covid-19.
Agregó que existen alternativas al paro planteado y que este tipo de medidas cargan una gran responsabilidad para quienes las adoptan, situación que se ve agravada por la actual pandemia a la cual está sometida la humanidad, hecho que podría derivar en un gran número de muertes.
“Hago un llamado a los sectores de salud que están movilizados para que busquen alternativas al paro indefinido, una medida extrema de grave responsabilidad moral y humanitaria que en esta calamidad de la pandemia podría causar un sin número de muertos”, indicó durante su homilía dominical en la Basílica de San Lorenzo de la capital cruceña.
Invitó a que se agoten las vías del diálogo entre representantes el área y el gobierno para encontrar una solución que beneficie a todos, pero por sobre todo se priorice la salud de la población ante la emergencia sanitaria por la que atraviesa el país y para evitar que se produzca una tragedia a causa de medidas extremas.
“Les animo a seguir con diálogo sincero, responsable y respetuoso con las autoridades públicas correspondientes y a no escatimar esfuerzos para encontrar una solución concertada en beneficio de la salud de todos los bolivianos. Ojalá hoy escuchemos todos, la voz del señor”, dijo.
Representantes del sector médico del país anunciaron el inicio de medidas de presión en caso de que el Gobierno continúe con el tratamiento de la Ley de Emergencia Sanitaria, que es considerada atentatoria contra este sector al coartar su derecho a la protesta y promover la contratación de profesionales extranjeros.
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