El golpe a los médicos que dan su vida por cuidarnos

La Constitución Política del Estado establece en el Artículo 53: “Se garantiza el derecho a la huelga como el ejercicio de la facultad legal de las trabajadoras y los trabajadores de suspender labores para la defensa de sus derechos, de acuerdo con la ley”. Un reciente proyecto de ley en su Art. 19 señala la prohibición de suspensión de servicios en Salud. “Durante el tiempo de la vigencia de la declaratoria de emergencia sanitaria, no podrán ser interrumpidos los servicios del sistema nacional de salud como consecuencia de los paros, huelgas, protestas, jornadas académicas u otras analogías”. Nuevamente se pretende vulnerar la Constitución, es inconstitucional tal proyecto porque vulnera el derecho a la huelga en defensa de sus derechos, la misma que realizan para exigir seguridad al desarrollar su trabajo en condiciones óptimas. Además, fue elaborado y aprobado sin consenso con los colegios de profesionales de salud y el soberano, contrariamente a lo que manda la Constitución.

El sector de salud reclama por más camas, solo tenemos en Bolivia 252 camas de internación y 35 UTIS, reclama por 1.300 UTIS, 1.000 intensivistas, solo tenemos 280, para los enfermos del Covid-19, para afrontar la fase 2 y para los enfermos de cáncer de mama que es la segunda causa de muerte de mujeres en el país. Esto equivale a decir que una mujer muere cada día debido a esta enfermedad.

“Art. 28 (Contratación de Personal): El Ministerio de Salud y Deportes en el marco de la declaratoria de la emergencia sanitaria podrá simplificar los requisitos y procedimientos para la contratación del personal médico, de enfermería y técnicos de la salud, quedando habilitado para contratar profesionales médicos que hubieran concluido sus estudios en Bolivia o en el extranjero, estudiantes de medicina y médicos jubilados”. Lamentablemente, se da vía libre para contratar a cubanos, se pagaba más de $us 43 millones, $us 4.000 a 750 ¨pseudo médicos”, se comprobó que solo 200 eran médicos “titulados” y recibían Sus 200, los otros 550 eran terroristas que incitaban a la violencia. El resto iba directamente al gobierno de Cuba, o sea con nuestros impuestos estábamos pagando a terroristas, cuando hay 10.000 médicos BOLIVIANOS desocupados y los que trabajan ganan entre 600 y 800 $us.

En la elaboración de este proyecto de ley se debía aplicar la Constitución, como define el Art. 242. 2. “Apoyar al Órgano Legislativo en la construcción colectiva de las leyes”, pero no hubo consenso con los del sector Salud, quienes están en primera línea para combatir el Covid-19 y merecen respeto y consideración, además muchos de ellos han dado su vida en esta lucha desigual, porque no cuentan con recursos materiales. Por ello realizan su huelga, exigiendo medicamentos, equipamiento e infraestructura para acoger a los contagiados con el virus; están defendiendo sus derechos laborales.

El gobierno de Bolsonaro informó que el régimen cubano se quedaba con alrededor del 75% del salario de los médicos en Brasil, que pagaba por ellos unos 3.100 dólares al mes, mientras que los galenos apenas percibían 700 dólares mensuales. El gobierno de Miguel Díaz-Canel ganó en 2018 unos 6.400 millones de dólares por los servicios médicos en el extranjero que, en algunos casos, han sido negociados con la intermediación de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS). También Ecuador decidió suspender el convenio médico con Cuba.

Es otro golpe que se dio al sistema sanitario y los enfermos de la pandemia que aumentan ante la mirada pasiva del servidor aguantArce, que no tiene estrategia para enfrentar la segunda ola del virus letal, solo trajeron 20.000 dosis de vacunas que compró de Rusia cada una a $us.9,50. Pero las dosis de vacuna no alcanzarán para más de 60.000 personas del sistema sanitario, asegurando que otra partida llegará en febrero. Los médicos solo piden declarar Emergencia Sanitaria por las precarias condiciones, la falta de atención y además que fallecieron 600 médicos y personal sanitario, NO MAS muertes de los médicos que están en primera línea.

La autora es Abogada, ex Asambleísta Constituyente.