El argentino no brilló y fue incapaz de levantar al Barcelona de su caída catastrófica.
La cuestión tenía color de rosa en el primer tiempo, luego de que De Jong cayera dentro del área por el toque de Kurzawa y Lionel Messi tomara la pelota con confianza para ejecutar el penal que adelantó al dueño de casa. El Barcelona se puso 1-0 arriba en el Camp Nou y enseguida el argentino asistió a Dembélé para la que fue una jugada que pudo haber cambiado el rumbo del partido y la serie. El francés definió débil ante la incredulidad de la Pulga y luego de eso todo se modificó para mal.
El castillo de naipes de los culés se desmoronó y la temperatura de Messi fue en aumento. El rosarino jugó un partido regular, no estuvo con todas las luces y tampoco recibió demasiada ayuda de sus compañeros. El capitán blaugrana ordenó en el entretiempo pero todo fue en vano: en la última mitad los parisinos se armaron un festín de la mano de Kylian Mbappé, figura estelar del encuentro, y se impusieron 4-1 por la ida de los octavos de la Champions League. Las cámaras reflejaron el disgusto que le generó a Messi el 1-2: como casi nunca se lo había visto, gesticuló e hizo ademanes contra los defensores de su equipo y también se desquitó contra el juez de línea que no divisó una supuesta posición adelantada de Florenzi que, según constató el VAR, no existió. Y si estar en desventaja lo había hecho enervar, el tercero del PSG convertido por Moise Kean le detonó el ánimo. Su rostro, con la mirada perdida, lo dijo todo. Sus esfuerzos por descontar fueron en vano. En el segundo tiempo dispuso de un tiro libre en la puerta del área tras una falta que recibió pero no superó la barrera. El balón se fue al córner, que ejecutó al segundo palo y casi es concretado de cabeza por Griezmann, que no llegó a conectar. El 10 hilvanó algunos ataques que no terminaron de ser claros. Y se desinfló, como el resto del elenco conducido por Ronald Koeman.
De muy poco le servirá a Messi haberse transformado en el futbolista con más tantos convertidos en series de octavos de final de Champions League. Si venía dudando de su futuro en Barcelona, esta nueva estrepitosa caída puede llegar a ser un símbolo de su alejamiento definitivo a mitad de año. En Francia los rumores crecen: ¿será este rival de turno su próximo destino?
RONALD KOEMAN: “ELLOS HAN SIDO SUPERIORES”
El FC Barcelona fue netamente inferior a su rival en el Camp Nou esta noche en la ida de los octavos de final de Champions. El equipo de Ronald Koeman cedió por un claro 1-4 ante un equipo coral y en el que una figura, la de Mbappé, sobresalió por encima de las demás. En la rueda de prensa posterior al partido, Ronald fue autocrítico con la actuación de los suyos y admitió que hubo un equipo superior en casi todas las facetas ante el otro. “Ellos han sido superiores, han demostrado en la segunda parte que tienen un equipo más completo que nosotros. Sabemos que nos puede pasar porque jugamos contra un gran equipo. Un gran equipo que físicamente está por delante de nosotros”, aseguró el técnico neerlandés. Sobre las opciones del equipo de cara a la vuelta en París, Ronald fue muy sincero y franco y no dio falsas esperanzas al entorno: “El 1-4 es muy complicado. Te puedo mentir pero perdiendo 1-4 en casa hay muy pocas opciones”. Sobre la vuelta de Piqué, Koeman aseguró que “nunca se sabe exactamente cuando es el momento oportuno después de tres meses. Podía ser hoy o domingo. Hemos tomado la decisión entre Gerard, el médico y yo . No había que arriesgar jugar 90 minutos”.
“Estamos my felices”, Mbappé
Kilyan Mbappé estaba satisfecho tras el partido por la victoria, por tener casi atada la clasificación a los cuartos de final y por los tres goles. El francés ase expresaba al final del partido. “Estamos muy felices. Es un juego muy importante para nosotros. Queríamos venir aquí y ganar, eso es lo que hicimos, con un toque extra. Ahora estamos centrado en nuestros goles y ya tenemos un partido importante el domingo en Liga ya que todavía no tenemos margen”, dijo el atacante, que hoy jugó uno de los partidos más importantes de su carrera, por lo determinante que se mostró a lo largo del encuentro.