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Buscan reactivar su economía
El presidente de la Cámara Departamental de Industrias de La Paz (Cadinpaz), Raúl Crespo, propone al Gobierno nacional la declaración de Zona Económica Especial a la ciudad de El Alto para reactivar su economía, esto en oportunidad del aniversario de esta ciudad, hoy, 6 de marzo.
Agregó que para la reactivación de la economía de El Alto es fundamental la declaratoria de Zona Económica Especial, que permite incentivos fiscales, como la liberación de impuestos como ser: Impuesto a las Utilidades, Impuesto a las Transacciones, Gravamen Arancelario y el Impuesto a la Propiedad de Bienes Inmuebles.
“La ciudad de El Alto experimenta en los últimos años un proceso de desindustrialización que se agravó con la crisis generada por la pandemia del Covid– 19, es en este sentido que para reactivar la economía alteña y generar más fuentes de empleo formales y productivos se requiere que El Alto sea declarado como zona económica especial”, afirmó Crespo.
En el país existen varias zonas económicas especiales que a través de leyes específicas y decretos supremos generan diferentes incentivos fiscales, tributarios, comerciales y de infraestructura productiva, que permiten atraer inversión nacional y extranjera, así como también incrementar la producción y la generación de empleo.
“Al declararse zona económica especial a la ciudad de El Alto se permitirá implementar encadenamientos productivos, parques industriales, maquicentros, parques tecnológicos, entre otros”, agregó el Presidente de la Cadinpaz.
La ciudad de El Alto acoge a más del 60 % de las industrias del departamento de La Paz, en los rubros de medicamentos, alimentos, bebidas, plásticos, manufacturas de madera, textiles y metalmecánica, entre otros.
El presidente Crespo concluyó felicitando a la población de El Alto por su espíritu de superación constante y progreso, que es esencial en su contribución al desarrollo industrial, productivo y social del país.
Conflictos
Por otra parte, los conflictos que se generaron en 2003 provocó el traslado de industrias a otras regiones del país, debido a los problemas sociales que se presentaron, y que agravó la situación política de este año, y que terminó con la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada.
Pese a ello se quiso impulsar la reactivación de la economía alteña atrayendo industrias con una Ley de incentivos, pero la puesta en marcha de la norma tuvo muchas dificultades para ser ejecutada hasta la fecha.
