Autoridades evalúan daños en El Alto
> Techos de unidades educativas cedieron ante el peso del granizo, algunas casas se inundaron y causaron el temor de cientos de vecinos
Dos tinglados de unidades educativas caídos, casas destruidas y calles inundadas fue el saldo que dejó la fuerte granizada del lunes, fenómeno que duró alrededor dos horas y que causó zozobra entre los habitantes de los barrios afectados.
De acuerdo con un informe preliminar brindado por la Dirección de Gestión de Riesgos (DGR) del municipio, se tiene conocimiento de que más de 20 domicilios fueron afectados, algunos por la intensa granizada que cayó en horas de la tarde del lunes y en otros casos por los vientos huracanados.
“El municipio está asistiendo y evaluando los trabajos, producto de los fenómenos climatológicos ocurridos el lunes, como vientos huracanados y la intensa granizada. Estos ocasionaron el desprendimiento de cubiertas, caída de cables y muros, donde nuestro personal está realizando estos trabajos con la colaboración de los propios vecinos”, manifestó Mario Lima, responsable de la DGR.
Aún no se han cuantificado los daños materiales en los diferentes domicilios afectados, pero según el funcionario encargado de este tema, a la fecha se ha podido conocer de 12 casas dañadas en el Distrito 3, aunque continúan llegando los informes, en el caso de la Urbanización San Carlos del Distrito 12, entre otros que no fueron reportados.
De la misma forma, Lima señaló que luego de la evaluación se tiene planificada la ayuda en algunos domicilios que sufrieron daños mayores, en el desprendimiento de sus techos, como la caída de algunos muros, trabajos que serán realizados por la cuadrilla de emergencia con que cuenta dicha repartición edil.
Entre los tinglados de algunas unidades educativas que fueron dañados se encuentra el colegio Cuerpo de Cristo, de Villa Adela, donde dicha estructura metálica cedió a causa del granizo acumulado en el techo.
Otro de los daños se ha presentado en la unidad educativa Mariscal de Zepita de la zona de Río Seco del Distrito 4, donde la misma manera el techo del tinglado cayó por la fuerza del peso del granizo.
Vecinos y padres de familia de estos establecimientos señalaron que gracias a Dios no existió daños personales, porque estos tinglados son inmensos y podía haber generado quizá accidentes.
El fuerte granizo caído en esta urbe provocó el taponamiento de las bocas de tormenta en diferentes barrios de la urbe alteña.
Ríos inmensos se formaron en calles y avenidas en los diferentes distritos municipales.
Uno de los problemas que tiene la urbe alteña es que la mayoría de las zonas de esta ciudad no cuentan con el alcantarillado pluvial, por lo que solo utilizan algunas bocas de tormenta que son insuficientes.