185 piezas y otras especies
Los colmillos de jaguar decomisados a traficantes de fauna silvestre pasarán a custodia del Museo Natural de Historia Noel Kempff Mercado el próximo 18 de marzo por disposición judicial. También se determinó que la Gobernación de Santa Cruz y el Viceministerio de Medio Ambiente realicen la verificación y fiscalización de las 185 piezas cada seis meses.
Tras dos años de espera, por fin se determinó que los colmillos de jaguares, además de otras piezas de 17 especies, producto del tráfico de vida silvestre, pasen a custodia del Museo de Historia Natural Noel Kempff Mercado.
Según publicación de El Deber, el fallo fue emitido por la Sala Penal Primera, integrada por los vocales Edil Robles y Gladys Alba, quienes decidieron el futuro de las piezas, cotizadas en el mercado negro en casi 400.000 dólares.
La Gobernación hizo una apelación incidental a la resolución del juez Juan Coronado, que había rechazado que los colmillos pasen a otra instancia representativa del Estado que no fuera la judicial. Los colmillos estaban decomisados en el juzgado de Coronado.
ESTUDIO DE ESPECIES
El Museo de Historia Natural Noel Kempff Mercado tiene la posibilidad de hacer mejores análisis para caracterizar cada especie y facilitar su identificación, y también de realizar estudios de genética molecular con las muestras que lo permitan de los 185 colmillos de félidos, producto del tráfico silvestre, dijo recientemente a EL DIARIO el biólogo experto en biodiversidad de Bolivia, Damián Rumiz.
Después de dos años, el pasado 26 de enero de 2021, la Sala Penal Primera determinó que los colmillos, cueros, pieles, garras y otros objetos que provienen del tráfico de animales silvestres y que fueron secuestrados dentro del proceso penal sean destinados al repositorio dependiente de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm).
Para Rumiz, la sentencia judicial es fundamental para que esas partes (de animales) no sean destruidas o vuelvan al circuito del tráfico, y que puedan servir de referente para capacitación de funcionarios de control y educación al público.
“También esperamos que como antecedente, las instituciones nacionales de investigación reciban en custodia otros materiales decomisados y nos permitan catalogar y estudiar esas muestras”, aseveró el especialista en fauna silvestre e investigador asociado al Museo de Historia Natural.
El biólogo y la responsable de Zoología Vertebrados, Kathia Rivero, ambos del museo, participaron en el peritaje de identificación de las muestras para conocer la especie, categoría de amenaza, estimación de individuos afectados, posible procedencia y antigüedad de las partes.
“El examen morfológico que realizamos en los dientes fue limitado por el tiempo disponible y la novedad del tema para nosotros, ahora vemos la posibilidad de hacer mejores análisis de morfometría geométrica (estudio cuantitativo de la variación de las formas biológicas) para caracterizar cada especie y facilitar su identificación”, explicó Rumiz.